El dólar, con sus precios, expresa la desconfianza en que el gobierno vaya a reacomodar sus cuentas

El Banco Central tuvo un respiro en su pelea con el mercado. Pudo comprar en el mercado para respaldar sus reservas, pero no se observa que eso implique un cambio de tendencia

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El Banco Central vio crecer sus reservas después de 23 días
El Banco Central vio crecer sus reservas después de 23 días

La rueda del miércoles le dio un respiro al Banco Central, pero de ninguna manera representó un cambio en la tendencia respecto al dólar y a la caída de las reservas. Tampoco recibió señales de que van a ingresar nuevas divisas a la Argentina ni que el mercado le devolvió la confianza en su gestión. Todo está como estaba antes, con la sola excepción que después de que las reservas tuvieron un humilde aumento de USD 20 millones a USD 41.132 millones. Este dato no hubiera sido noticia si este movimiento de alzas ocurriera con frecuencia. Pero desde el 16 de setiembre, no había sucedido algo similar. Aquel día las reservas aumentaron USD 26 millones y se ubicaron en USD 42.521 millones. En el balance general, desde aquel día las reservas bajaron USD en estos 22 días las reservas perdieron USD 389 millones.

El dólar, más allá de la baja de los alternativos, mostró un comportamiento preocupante. El “blue” o dólar libre, aumentó $ 3 al récord de $ 155 porque los ahorristas impedidos de comprar el dólar ahorro, van a este mercado marginal a cubrirse y como hay pocos vendedores, pagan lo que les piden.

En la plaza oficial, en bancos y casas de cambio no tuvo variaciones y cotizó a $ 82,72, lo que hizo que el dólar ahorro estuviera en un promedio de $ 135,30. La compra de los ahorristas autorizados a pagar a este precio el cupo de USD 200 mensuales, fue mínima; apenas USD 10 millones. En los meses anteriores se estaría hablando de ventas superiores a USD 50 millones, pero el supercepo limpió drásticamente la lista de los autorizados y comenzó a hacer crecer el negocio marginal.

En la plaza mayorista con escasos negocios por USD 161 millones, hubo un puñado de exportadores, la mayoría ajenos al sector agropecuario, que liquidó divisas y menos importadores porque encuentran restricciones para comprarlos. Por eso en el balance final logró salir airoso y compró USD 20 millones. El dólar comercial aumentó 4 centavos a $ 77,11. Pero sigue sin lograr su objetivo de atraer a los grandes exportadores que no se desprenden de sus cosechas a ese valor porque apuestan a que el tipo de cambio que conseguirán si tienen paciencia, será considerablemente más elevado.

Fuente: Rava Online
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Lo curioso es que el gobierno quiere mejorar el tipo de cambio a los productores agropecuarios bajando en tres puntos sus retenciones y por otro lado amenaza con el impuesto a las grandes riquezas. El sector agropecuario es el más afectado, porque los pequeños productores que tengan 100 hectáreas pueden ser alcanzados por el impuesto. Por eso el campo fue uno de los sectores que encabezaron la ofensiva contra el diputado Carlos Heller, el motor de este nuevo gravamen.

El exceso de impuestos y la falta de actividad económica, no parecen ser tenidos en cuenta a la hora de legislar. Por caso, con la ley de alquileres y este gravamen hicieron bajar el precio de los departamentos y aumentar el valor de los alquileres. La principal víctima de la medida es la construcción.

Como si fuera un aviso fúnebre de empresas, Falabella anunció que mañana Adrián Mercado rematará vía online todos sus muebles y stands del local y de las oficinas que mantenía en Florida al 300. Cuando se observa la lista de todo lo que caerá bajó el martillo del rematador, se toma dimensión de lo que provocan las salidas y cierres de empresa en el país. La diferencia con la fuga de dólares, es que las divisas pueden regresar cuando cambie la situación económica, pero las empresas difícilmente retornen. Se vio en el 2000 cuando Gillette, Adams y otras grandes corporaciones, eligieron Brasil como destino.

Fuente: Rava Online
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En tanto, Alberto Fernández comenzó a intentar un acuerdo con los empresarios que prometieron USD 100 mil millones en exportaciones anuales y la creación de decenas de miles de empleos a cambio de concesiones que el gobierno no está dispuesto a ceder porque para reemplazar esa caída de ingresos debe reducir el gasto público, un concepto que no está dentro de su manual de gobierno tal como hizo público el ministro de Economía, Martín Guzmán. Lo curioso es que el FMI, aunque haya trascendido que no se hablará del gasto público, le exigirá un menor déficit fiscal que solo lo podrá lograr subiendo impuestos o bajando el gasto. Todos los escenarios llevan al mismo punto de partida. El dólar, con sus precios, expresa su desconfianza en que el gobierno reacomode sus cuentas.

Por eso los dólares alternativos, a pesar de la baja del miércoles, siguen elevados y van a continuar en alza. El dólar bolsa o MEP, perdió $ 1,19 y cerró en $ 138,97 pero con escasos negocios por USD 19 millones uno de los volúmenes más bajos de las últimas semanas. El contado con liquidación sigue operando volúmenes elevados. Esta vez se negociaron USD 62 millones y no intervino el Banco Central vendiendo bonos porque por ahora no puede hacerlo ante la depreciación que padecen los títulos públicos. El “contado con liqui” bajó $ 2,12 a $ 150,39. Sigue muy cerca del valor del dólar libre.

Los bonos se operaron casi sin cambios y el riesgo país se mantuvo en 1.373 puntos básicos, aunque en el exterior casi todos son vendedores de estos títulos argentinos porque su calificación es de elevado riesgo.

Fuente: Rava Online
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La Bolsa siguió en alza pero siempre perdiendo frente al dólar, una situación que el inversor ve como una derrota. No le interesa que sus activos suban en pesos y caigan en dólares. En estas circunstancias, se negociaron $ 1.046 millones, un volumen normal para esta época de desinterés por el riesgo. El S&P Merval, el índice de las acciones líderes, subió 0,68% después de remontar una caída de 1,58% a las 11.30. Lo positivo, es que el indicador cerró en el máximo del día.

Lo mejor pasó por Central Puerto (+3,70%) escoltado por Cresud (+3,26%) y por CableVisión (+2,61%). Los bancos tuvieron leves alzas que en la mayoría de los casos fueron inferiores a 1%.

Los ADR’s argentinos -certificados de tenencia de acciones que cotizan en las Bolsas de Nueva York- tuvieron una buena rueda. MercadoLibre, que cotiza entre las tecnológicas que fueron las de gran resurrección después de los anuncios de Donald Trump sobre medidas para aliviar a las pequeñas y medianas empresa, subió 4,9%y con esta mejora alcanzó a redondear un aumento de 100% en lo que va del año. Central Puerto con 3,8% e IRSA con 3,4%, fueron los otros certificados destacados.

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