Guzmán aprovechó la calma para financiarse

Mientras el mercado local todavía procesa en tono positivo las primeras semanas del Gobierno de Albertó Fernández y su foco en la mejora de las cuentas fiscales de cara a una renegociación de la deuda, el ministro de Hacienda Martín Guzmán aprovecha la calma para intentar que el Tesoro pueda volver a financiarse en el mercado local.

El viernes, el Ministerio de Economía cerró su segunda colocación de deuda en pesos de corto plazo a través de la colocación de una letra a tres meses y la reapertura de otra a seis meses, emitida la semana previa.

El resultado de la segunda prueba de Guzmán en el mercado fue modesto. Consiguió $ 18.169 millones que usará para ayudar a enfrentar un vencimiento de casi $33.000 millones en Letras del Tesoro reperfiladas por la anterior administración que se pagan hoy. Es algo menos del 60% de lo que necesitaba y, según fuentes del mercado, parte de la operación debió ser cubierta con fondos de Anses.

La Letra del Tesoro a 95 días se emitió a 200 puntos por sobre la tasa Badlar, a 43,04%, mientras que la de 175 días se cerró a 43,58%.

La fuerte demanda por pesos de fin de año puede haber tenido su rol. Con todo, el Gobierno logró marcar tasa a 3 y a 6 meses, en un intento por reconstruir el mercado local. Según Hacienda, la emisión persiguió “el objetivo de continuar construyendo una curva de rendimientos consistente con las políticas de deuda oportunamente comunicadas”.

“La tasa de adjudicación se ubicó en niveles consistentes con la secuencia planteada en el programa macroeconómico orientado a restablecer la sostenibilidad de la deuda y en línea con las recientes decisiones del BCRA orientadas a colaborar en la definición de una nueva curva de tasas de interés en moneda nacional”, agregó Economía en un comunicado.

Diciembre de recuperación

Con sólo la rueda de hoy por delante para cerrar el año, el índice S&P Merval de la Bolsa porteña acumula un avance del 20,8% en lo que va de diciembre, una porción muy relevante del 37% que avanza en lo que va del año.

Es un cierre de año con un rebote enorme que, sin embargo, no alcanza a borrar las pérdidas de un año poco menos que catastrófico para el mercado local. Medido en términos de dólares, el movimiento de septiembre supone una ganancia del 21% en el último mes del año. El rebote, sin embargo, no evita que en términos interanuales el indicador muestre un retroceso del 13% en moneda dura.

Los bonos soberanos, por su parte, lideran el repunte con avances con repuntes de hasta 30% en el mes. El riesgo país terminó el viernes en 1738 unidades, 524 puntos por debajo de su cierre de noviembre.

“Las medidas tomadas (y lo que se interpreta de algunos comentarios oficiales) parece por ahora bastar para que el mercado sostenga las expectativas de una probable reestructuración de deuda amigable y medianamente rápida. Acá entendiendo, por ejemplo, que el aumento de las retenciones, la suba de impuestos y la reforma jubilatoria apuntan a ser alternativas que le permitirán al Gobierno la sostenibilidad fiscal a cualquier oferta que se termine poniendo sobre la mesa”, analizó un informe de Portfolio Personal Inversiones.

Semana corta

Los mercados del mundo operarán con volumen reducido de cara a las últimas ruedas del año. En Buenos Aires, la Bolsa de Comercio no operará en los días 31 de diciembre y 1° de enero, aunque Wall Street trabaja con horario normal el último día del año, al menos en lo que concierne a la operación de acciones (el mercado de bonos cierra a las 14, hora de Nueva York). En Buenos Aires tampoco habrá bancos durante esas dos ruedas, lo que deprime incluso las operaciones en el mercado cambiario informal.

Los operadores no tienen en carpeta catalizadores a la vista en el corto plazo que puedan cambiar la dirección del mercado. Para el viernes se espera la publicación de las minutas de la última reunión de la Reserva Federal de los Estados Unidos, aunque no se esperan sorpresas respecto de la actitud de mantener estables las previsiones de tasa para el futuro.

Codicia extrema

Con la firma de un acuerdo comercial de “fase uno” entre los estados Unidos y China en puerta y los principales bancos centrales del mundo en posturas expansivas, los índices bursátiles del mundo están en niveles récord generalizados. El ímpetu de los inversores de todo el mundo no muestra señales de cejar, aunque las miradas ahora empiecen a buscar el punto de inflexión en el que el mercado alcista posterior al crack de 2008 llegue a su fin.

Fue un año de celebración en Wall Street, con el S&P 500 subiendo casi un 30%, pero los inversores que confiaban en las tendencias estacionales probablemente se encontraron frustrados ya que el mercado desafió los patrones tradicionales. El indicador se desempeñó por encima de sus promedios históricos en todos los meses del año, a excepción de dos.

Un índice de CNN Business, el Fear & Greed Index (Índice de miedo y codicia) que combina siete variables -fuerza de las acciones, demanda por bonos de riesgo, posición de las acciones por sobre su promedio móvil de 125 días, volumen negociado, compra de opciones de cobertura, demanda por activos de refugio y volatilidad del mercado- para calificar la actitud de los inversores, marca “codicia extrema” como el humor que domina al mercado desde este mes. Cinco de sus sietes índices pasaron a codicia extrema este diciembre, luego de buenos datos económicos en los Estados Unidos y los avances en las negociaciones comerciales.

Wall Street señala una apertura alcista

Las acciones cayeron en Europa y dieron resultados mixtos en Asia hoy lunes, mientras que los futuros de los índices estadounidenses subieron en el penúltimo día de un año muy exitoso para muchos mercados de valores. El dólar se dirigió a una tercera sesión consecutiva de caídas.

El índice Stoxx Europe 600, que agrupa a las principales acciones del continente, cayó después de que la mayoría de los mercados de valores asiáticos se hundieran. Las excepciones fueron Hong Kong y China, donde las acciones de los corredores de bolsa subieron después de que la legislatura aprobara los cambios legales que podrían facilitar la negociación de las nuevas empresas.

En las operaciones previas a la apertura de Wall Street, se sugería un inicio alcista para la rueda del día. Los futuros del índice S&P 500 subieron después de que el indicador tuviera una sesión deslucida el viernes.

Los inversores están reduciendo sus operaciones y eso podría continuar durante las fiestas de Año Nuevo en Europa y Estados Unidos, limitando el año 2019 en el que varios de los valores de referencia del mercado de valores mundial marcaron máximos históricos. Con el telón de fondo del persistente estímulo de los bancos centrales, los fuertes pagos de los accionistas y el sellado anticipado de un acuerdo comercial interino entre Estados Unidos y China en enero, muchos participantes del mercado dicen que siguen estando al alza para principios de 2020.

Seguí leyendo: