Tom Brady y los Patriots de Nueva Inglaterra chocarán el 4 de febrero ante los Eagles de Filadelfia, uno de los 13 equipos que nunca gritó campeón en la NFL y cuya última final fue en 2005 y justamente ante el mismo rival de esta edición.
Este año, el Super Bowl LII será en Minneapolis, Minnesota, en el gigantesco estadio de los Vikings, que alcanzaron las semifinales, pero cayeron ante los Eagles.
El U.S. Bank Stadium tiene una capacidad superior a los 66.500 espectadores. Su construcción inició en diciembre de 2013 y fue inaugurado el 22 de julio de 2016, bautizado como la entidad que puso 220 millones de dólares para colocar allí su nombre durante 25 años.
El edificio tiene un techo que cubre toda la cancha y ventanales gigantes a los costados que permite el ingreso de luz solar para ahorrar energía.
El edificio cuenta también con un hotel, cinco restaurantes temáticos, estacionamiento, una zona de diversión para jóvenes en el que se destaca una pista de skate y salones para eventos.
El estadio, casa de los Vikings y por eso lleva los colores violetas en todas sus gradas, es además el hogar de la Universidad de Minnesota para los partidos de béisbol de su equipo y albergador de grandes eventos de la ciudad de Minneapolis. Este año, además del Super Bowl, habrá conciertos de Ed Sheeran y Taylor Swift, entre otros acontecimientos destacados como el Monster Jam.
El Super Bowl se disputará el 4 de febrero en un megaevento que incluirá un show de Justin Timberlake en el medio tiempo. Además, una vez que se conozca a los nuevos campeones habrá un show de fuegos artificiales.
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Crédito: AFP-Reuters