Horas de terror son las que vivió Nelson Rolandelli, vicepresidente de Patronato, junto a su familia en la madrugada de este viernes al recibir al menos diez disparos de bala en el frente de su domicilio.
Todavía no se pudo identificar la cantidad de individuos que, pasada la medianoche del jueves, se habrían conducido en moto hasta la casa del mandatario del club de Paraná para efectuar una serie de disparos contra la fachada del domicilio, según advierte el informe policial.
El Jefe de la Policía Departamental de Paraná, el comisario Marcos Antoniow, vinculó los ataques con la barra brava del Patrón. Se estima que los violentos actuaron de esta manera debido a que se les prohibirá la entrada al estadio Presbítero Bartolomé Grella el próximo sábado en el encuentro ante River.
Según el medio entrerriano El Once, Rolandelli ya había sido amenazado por la Barra y su familia le había pedido que renunciara a su cargo en el elenco rojinegro, algo que podría suceder este viernes, estiman algunas voces de la comisión directiva del club.
No es la primera vez que este polémico grupo de hinchas de Patronato llevan a cabo un acto de violencia. En noviembre de 2017 durante el partido ante Unión por la fecha 10 de la Superliga, la barra brava del equipo local agredió salvajemente a un grupo de chicos y padres de una escuelita de fútbol de la localidad de Strobel.
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