Luego de meses de negociaciones, Barcelona cumplió el sueño de contratar al brasileño Philippe Coutinho y le quitó al Liverpool su principal figura. El equipo inglés tiene como desafío en este mercado de pases llenar rápidamente el hueco que se generó ante la partida de su estrella y tiene en carpeta a un futbolista argentino: Alejandro Gómez.
El Papu es el líder del Atalanta de Italia desde hace cuatro años y es una de las figuras del Calcio, situación que lo llevó a ser citado por Jorge Sampaoli para disputar los últimos partidos de las Eliminatorias Sudamericanas.
Su carrera podría continuar por esa curva ascendente si el Liverpool se decide a desembolsar los 60 millones de euros que se rumorea que podría costar la operación. En ese caso, el mediocampista de 29 años surgido de Arsenal de Sarandí se transformaría en el reemplazante de uno de los hombres del momento.
El presidente del Atalanta, Antonio Percassi, advirtió que no está dispuesto a negociar la transferencia del capitán del equipo, aunque aceptó que podría venderlo en el caso de que llegue una oferta "imposible de rechazar".
Gómez tendrá tiempo de emigrar a la Premier League hasta el próximo 31 de enero, fecha límite en el mercado de pases inglés. Hasta el momento, ostenta 18 presentaciones en este temporada en la Serie A italiana y suma cuatro conquistas.
Cabe destacar que días atrás también se rumoreó que el entrenador Jürgen Klopp tenía en sus planes al argentino Manuel Lanzini del West Ham para ocupar el espacio vacante de Coutinho.
El jugador brasileño de 25 años es la tercera compra más cara de la historia del fútbol mundial —detrás de Neymar (222 millones de euros) y del francés Kylian Mbappé (180 millones de euros), ambos del París Saint-Germain—, luego de que el Barcelona abone 120 millones de euros por su ficha más la posibilidad de desembolsar otros 40 millones en concepto de objetivos.
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