Desde hace meses la selección argentina de Dodgeball pelea por codearse con los países que compiten año a año en esta desconocida disciplina que se asemeja al "quemado" y tiene aspiraciones de ser deporte olímpico en el futuro. Sin embargo, los tiempos y los costos no permitieron que el combinado nacional compita en el Mundial de Canadá. No obstante, hubo representación en el evento.
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Diego Bertola, presidente de la federación argentina, fue invitado por los organizadores para presenciar la cita mundialista que tuvo como gran ganador a Malasia, tanto en el género masculino como femenino.
Los malasios ganaron todos sus compromisos en el grupo, derrotaron a Australia en semifinales y se impusieron ante el anfitrión Canadá por 8-6 en el cotejo decisivo. Por su parte, las mujeres cayeron en tres presentaciones durante la primera fase, pero fueron se impusieron por la mínima ante Estados Unidos en semis y celebraron contra Australia en la final.
Argentina tenía reservado un cupo entre los ocho seleccionados que disputaron esta Copa del Mundo, que finalmente fue cedido a un elenco alternativo local. La idea es que el año que viene el seleccionado albiceleste participe activamente por primera vez en la historia, en el Mundial que se llevará a cabo en Los Ángeles, Estados Unidos.
Al margen de los proyectos que existen dentro del país, con la conformación de una liga metropolitana y también nacional, el cónclave con las autoridades canadienses -con Duane Wysynski, presidente de la federación mundial de dodgeball- fue vital para que depositen su confianza en el territorio latinoamericano. Entre otras ideas, planean formar a profesores de educación física para que sean designados como árbitros oficiales.