Repensar la economía: inclusión, equidad y regeneración para el futuro del planeta

Con un mundo en crisis sanitaria y ambiental, ¿se puede pensar un cambio traccionado desde las empresas y las finanzas?

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"Creemos en un nuevo tipo de empresa que se comporta con propósito, responsabilidad y transparencia. Estos son los tres elementos de una firma para la nueva economía. El propósito de generar impacto positivo, social y ambiental", dice el especialista. Foto: Archivo DEF.
"Creemos en un nuevo tipo de empresa que se comporta con propósito, responsabilidad y transparencia. Estos son los tres elementos de una firma para la nueva economía. El propósito de generar impacto positivo, social y ambiental", dice el especialista. Foto: Archivo DEF.

El año 2030 era el indicado por las Naciones Unidas para cumplir con los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Y, si a metas “verdes” nos referimos, el Acuerdo de París instala una realmente desafiante: frenar el calentamiento global. En ese contexto, las empresas adquieren un rol clave.

El brasileño Marcel Fukayama dirige Sistema B, una propuesta que busca, desde la economía, promover nuevas formas de organización que repercutan en el bienestar de las personas y del planeta. Miles de empresas se sumaron a esta iniciativa con el objetivo de medir sus acciones. En diálogo con DEF, Fukayama se refirió a los aspectos que las empresas deben tener en cuenta a la hora de pensar en un nuevo modelo más equitativo, aspecto clave en un mundo de cambio en el que los inversionistas, consumidores y trabajadores adoptaron una nueva manera de pensar en los productos y las firmas.

“NUESTRO ROL ES ACELERAR ESTE CAMBIO DE CULTURA EMPRESARIAL”

-¿Existe una conciencia de cambio?

-Yo soy muy optimista porque se nota un gran cambio de cultura. La pandemia, de alguna manera, ha modificado mucho el contexto. Se ha evidenciado en todo el mundo, y en América Latina y el Caribe también, un cambio en el liderazgo público y empresarial. Esta agenda de Sistema B nunca fue tan relevante para estos liderazgos.

Los milenials y el trabajo: para Fukayama, la generación actual "quiere propósito de impacto. Entonces, aquellas empresas que lo incorporan en su cadena de valor, ambiente de trabajo y modelo de negocio, por lejos, van a tener mayor capacidad de atracción y de atención de estos talentos". Foto: Archivo DEF.
Los milenials y el trabajo: para Fukayama, la generación actual "quiere propósito de impacto. Entonces, aquellas empresas que lo incorporan en su cadena de valor, ambiente de trabajo y modelo de negocio, por lejos, van a tener mayor capacidad de atracción y de atención de estos talentos". Foto: Archivo DEF.

Esto nos permite trabajar el concepto de un nuevo perfil empresarial. Nosotros creemos en un nuevo tipo de empresa que se comporta con propósito, responsabilidad y transparencia. Estos son los tres elementos de una firma para la nueva economía. El propósito de generar impacto positivo, social y ambiental. Hoy hay más de 4000 empresas certificadas en todo el mundo y, en la región, más de 30 000 emprendimientos que utilizan la evaluación de Impacto B para medir, gestionar y transparentar su triple impacto. Este grupo de empresas nos ayuda a inspirar, liderar e influenciar este camino hacia esta nueva economía.

-En ese contexto, ¿qué rol tienen los otros actores del mercado?

-Lo que hemos percibido son tres factores claves de cambio en las empresas. Por un lado, los consumidores. Ellos están cada vez más informados y son responsables acerca de sus comportamientos de consumo. Un segundo factor son los trabajadores de las empresas. Hoy, la mitad de la fuerza laboral en el planeta es la generación millennial. Quieren propósito de impacto. Entonces, aquellas empresas que lo incorporan en su cadena de valor, ambiente de trabajo y modelo de negocio, por lejos, van a tener mayor capacidad de atracción y de atención de estos talentos. La tercera fuerza de transformación son los inversionistas, ya que promueven inversiones que, de hecho, generen un impacto positivo.

CAMINO DE MEJORA

-¿Cómo intervienen en la empresa para otorgar la certificación?

-La empresa necesita cambiar. La evaluación de Impacto B y la certificación como Empresa B permite a la firma tener métricas que son verificables, creíbles y comparables y le permite, de manera concreta, ser una mejor empresa para el mundo. Primero, la empresa debe medirse. Entonces, va a ser evaluada en 5 dimensiones: gobernanza, modelo de negocios, trabajadores, comunidad y medioambiente.

Si se transforma, se adapta con el mercado, el tamaño y el sector o industria en la que trabaja. Con esto, recibe un puntaje que puede ser de entre 0 y 200 puntos. Si la empresa logra el mínimo de 80, es elegible para certificarse como Empresa B. Luego, tiene que promover los cambios legales, cambios en sus estatutos, porque debe vincular los compromisos a largo plazo. Hecho este cambio legal, la empresa se certifica en Empresa B.

"La evaluación y certificación de impacto B le permite a la firma tener métricas que son verificables, creíbles y comparables, y le permite, de manera concreta, ser una mejor empresa para el mundo", dice Fukayama. Foto: Archivo DEF.
"La evaluación y certificación de impacto B le permite a la firma tener métricas que son verificables, creíbles y comparables, y le permite, de manera concreta, ser una mejor empresa para el mundo", dice Fukayama. Foto: Archivo DEF.

-Parecería que esto también requiere un cambio cultural…

-Yo creo que el principal desafío que este cambio tiene está en la cultura empresarial. Esto tiene que cambiar a corto, mediano y largo plazo. Está cambiando, teniendo en cuenta esos factores que mencioné antes. Porque la empresa, si no cambia en esos puntos, va a perder valor.

LA DÉCADA DE LA REGENERACIÓN SOCIAL Y AMBIENTAL

-¿Cómo se logra que ese cambio de cultura sea parte del sistema económico?

-Todo el mundo se vio afectado por la pandemia y eso genera, por otro lado, un contexto más favorable para promover estos cambios. Estamos hablando de cambios estructurales, de cultura y de comportamiento. Esto nos permite, por un lado, trabajar en el comportamiento empresarial, trayendo más empresas a este movimiento, y por el otro lado, poner el foco en las políticas públicas. El capitalismo ha sido muy importante para generar la riqueza que tenemos hoy. Pero, en los últimos 50 años, generó también graves consecuencias ambientales y una distorsión social absurda. En este contexto, las empresas tienen un rol en la sociedad.

De acuerdo con el nobel de Economía Joseph Stiglitz, las empresas tienen tres roles para enfrentar la desigualdad: pagar mejor a los trabajadores, abonar los impuestos e invertir. Por ejemplo, a través de la evaluación de Impacto B, consideramos un indicador de brecha salarial para medir la diferencia entre el salario más alto y el más bajo en las empresas. Las Empresas B de Chile se organizaron en torno de un desafío llamado “Diez X”, una invitación a las empresas a comprometerse a reducir esta brecha hasta 10 veces. Y, con respecto a los impuestos, nos pareció muy buena la decisión del G7 para enfrentar a la inequidad y promover la “global taxation”. Esto es muy interesante.

Las empresas tienen tres roles para enfrentar la desigualdad: pagar mejor a los trabajadores, abonar los impuestos e invertir. Por ejemplo, a través de la medición de impacto B, se considera un indicador de brecha salarial para medir la diferencia entre el salario más alto y el más bajo en las empresas. Las empresas B de Chile se organizaron en torno a un desafío llamado "Diez X", una invitación a las empresas en comprometerse en reducir esta brecha hasta en 10 veces. Foto: Archivo DEF.
Las empresas tienen tres roles para enfrentar la desigualdad: pagar mejor a los trabajadores, abonar los impuestos e invertir. Por ejemplo, a través de la medición de impacto B, se considera un indicador de brecha salarial para medir la diferencia entre el salario más alto y el más bajo en las empresas. Las empresas B de Chile se organizaron en torno a un desafío llamado "Diez X", una invitación a las empresas en comprometerse en reducir esta brecha hasta en 10 veces. Foto: Archivo DEF.

-¿Qué rol tienen las políticas públicas?, ¿estamos bien encaminados?

-En el mundo las políticas públicas, se están acercando a la construcción de esta nueva economía. Primero, porque hay una conciencia ampliada de que el Estado tiene un rol como inductor de esta nueva economía. Segundo, la fuerza del mercado puede protagonizar y resolver problemas sociales y ambientales complejos. Tercero, el cambio voluntario de inversionistas y empresarios.

Yo prefiero ser un eterno optimista. Esta es la década de la regeneración social y ambiental. Hay mucho en este sentido, creo que vamos a estar celebrando el cumplimiento de la Agenda 2030 y el logro de los próximos hechos del Acuerdo de París.

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