Arranca la Feria de Libros de Fotos de Autor

La decimoquinta edición de la Feria de Libros de Fotos de Autor (FELIFA) —el encuentro de fotógrafos, editores, artistas, diseñadores y público— tiene el objetivo primordial de promover la formación editorial, incentivar la producción y difundir libros de fotografías. El material expuesto no es solo un libro con un catálogo de fotos sino que cada uno de ellos cuenta una historia a través de las imágenes y eso es lo que lo hace tan atractivo.

Julieta Escardó es la organizadora de la FELIFA anual que desde 2002 revela las particularidades del mundo existente detrás de una cámara de fotos y la mirada siempre tan particular que tienen los fotógrafos. Sobre esta nueva edición dijo: "En el contexto en el que comenzó la feria era todo distinto a lo que es hoy porque muy pocos fotógrafos tenían un libro impreso y los que habían eran muy artesanales. La feria comenzó con publicaciones en maquetas, o prototipos, de libros que en realidad eran casi rudimentarios y, la mayoría, eran ejemplares únicos. En cambio, hoy el panorama es otro, en todo el mundo hubo explosión de libros de fotografía".

En la feria se hacen revisiones de portafolios o maquetas, una práctica muy común en la fotografía y todas las artes visuales. Este año la competencia tendrá como protagonistas a los 35 finalistas que aspiran al premio mayor: la publicación de su primer fotolibro. El jurado que evaluará los trabajos está integrado por destacados fotógrafos y referentes de la escena fotográfica nacional e internacional.

Una historia en fotos

Como concepto, el fotolibro es contemporáneo y apenas tiene 10 años. "Tiene que ver con libros que estructura su relato a partir de fotografías. No es un catálogo de fotos, es más parecido a una película o novela, o a un relato llevado adelante con imágenes fotográficas", explicó Escardó y aseguró que hubo varias cuestiones que generaron esa vitalidad expresiva.

"Hoy no hay festivales en el mundo en el que no haya un espacio para ellos. Hay miles. Y también hay secciones, foros, clubes de fotolibros… Eso tiene que ver con varias razones —detalla—: una, más existencial es la 'marca de época' que se resiste a la virtualidad y al fetiche del objeto 'libro'; desde lo económico cambió el concepto de producción… Antes imprimirlo y ponerlo en maquina costaba mucho, pero desde hace 10 años existen las imprentas digitales lo que favoreció a los más emergentes porque tienen mayor acceso a la producción, sumado a la posibilidad de llegar a las redes para difundirlo. Otra razón es la reivindicación del soporte del libro. Porque, por ejemplo, en una muestra se acota el tiempo y el mensaje que se quiere dar. En el libro puede estructurarse un relato que persiste, con potencial circulatorio que tiende a sobrevivir y viaja más lejos de lo que podemos ir. Eso sirve mucho para difundir nuestro trabajo".

Al inicio, en 2002, la feria duró un fin de semana y sólo contó con 80 profesionales de las imágenes que se conocían entre sí. También era la ocasión para juntar los libros de cada uno y verlos todos juntos. "Estos 15 años fui testigo de un cambio muy drástico", reflexionó.

Según contó su coordinadora, la feria está estructurada para que participen editoriales independientes y las especializadas en libros de fotos y sellos tanto argentinos como latinoamericanos. "Hay libros de todo tipos, documentales, de historia… Es muy lindo ver a la gente mirarlos. La feria es un punto convergente porque hay fotógrafos de todo tipo. Es un formato entrañable", finalizó.

Dónde: Godoy Cruz 2620, Distrito Arcos, C.A.B.A.

Cuándo: desde el jueves 24 al domingo 27 de noviembre, de 12:00 a 20:00

Más información: FELIFA