Gremio de esmeralderos pide que se investigue inmediatamente el asesinato de Juan Sebastián Aguilar en Bogotá

En un comunicado conocido por el periódico colombiano El Tiempo, Fedesmeraldas ha expresado su profunda consternación y rechazo ante el asesinato de Juan Sebastián Aguilar, ocurrido recientemente en Bogotá.

De acuerdo con el gremio, este incidente violento no solo quita la vida de un ser humano, sino que también representa un ataque a los valores de seguridad, paz y respeto que el gremio de los esmeralderos defiende con firmeza.

La organización extendió su solidaridad a la familia de la víctima en este momento de dolor y exigió a las autoridades una investigación exhaustiva para esclarecer los hechos del asesinato de Juan Sebastián Aguilar.

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El trágico suceso tuvo lugar en el exclusivo conjunto residencial Bosques del Marqués, ubicado en la calle 138 con carrera séptima.

Según reportes, un francotirador disparó desde una montaña cercana, alcanzando a Aguilar por la espalda. Esta modalidad de asesinato, que involucra un disparo de larga distancia, ha generado gran preocupación entre las autoridades y en la comunidad esmeraldera.

Según las primeras versiones, las heridas infringidas en el ataque fueron lo suficientemente graves como para que Aguilar no pudiera sobrevivir. A pesar de que fue trasladado rápidamente a un hospital cercano, los esfuerzos médicos no lograron salvar su vida. Las autoridades se encuentran investigando la posibilidad de que el crimen haya sido perpetrado por un francotirador.

“Fedesmeraldas y sus afiliados, Asocoesmeral, Acodes y Aprecol, de manera conjunta reafirmamos nuestro compromiso con la protección y el bienestar de todos los colombianos y hacemos un llamado urgente a las entidades del Estado para reforzar las medidas de seguridad en nuestro sector. La violencia no puede ni debe ser tolerada en ninguna circunstancia”, enfatizó el gremio en un comunicado oficial.

El asesinato de Aguilar, conocido como “Pedro Aguilar” en la zona de Muzo, Boyacá, ha despertado temores sobre un posible resurgimiento de la “guerra verde”, un conflicto que en las décadas de 1980 y 1990 dejó una sangrienta estela de violencia en el sector esmeraldero. Aguilar, quien en el pasado trabajó con el conocido esmeraldero Víctor Carranza, era socio de la mina Santa Rosa y tenía fuertes vínculos con otros influyentes esmeralderos como Hernando Sánchez.

Este no es el primer atentado que Aguilar ha sufrido. En octubre de 2023, sobrevivió a un intento de asesinato en un edificio de lujo ubicado en la calle 113 con carrera novena, en Bogotá. En esa ocasión, el ataque ocurrió en la terraza del piso 15 de la sede de Esmeraldas Santa Rosa, lo que provocó nerviosismo tanto en el gremio como entre las autoridades.

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Fuentes judiciales han señalado a El Tiempo que el ingreso al conjunto residencial donde Aguilar fue asesinado requiere superar tres anillos de seguridad, lo que resalta la planificación meticulosa detrás del crimen. “Fue de larga distancia, no a quema-ropa. El asesino estaba en una montaña contigua”, comentó un investigador involucrado en el caso.

Aguilar, quien también era propietario de la firma Seguridad Oriental Ltda., había logrado escalar posiciones en el mundo de las esmeraldas, pasando de ser escolta de Víctor Carranza a ocupar un puesto en la junta directiva de Esmeraldas Santa Rosa S.A., compartiendo la mesa con importantes figuras del sector.