El senador Álex Flórez fue suspendido por insultar borracho a policías en Cartagena

El senador Álex Flórez será suspendido e inhabilitado por ocho meses por atentar contra derechos constitucionales al tratar de asesinos a tres policías en Cartagena. Los hechos ocurrieron el 2 de septiembre cuando el senador estaba bajo los efectos del alcohol.

Sin embargo, la suspensión no estará en firme hasta que el Consejo de Estado no se pronuncie al respecto, debido a que se trata de los derechos políticos de un funcionario elegido popularmente.

“Imponer a Álex Javier Flórez Hernández la sanción de suspensión o inhabilidad especial durante ocho meses contados a partir de la ejecutoria de este fallo, la que por involucrar a un servidor público de elección popular queda suspendida hasta que el consejo de Estado se pronuncie sobre la misma”, leyó la procuradora delegada.

La Procuraduría determinó que Álex Flórez se encontraba en ejercicio de sus funciones como senador, en Cartagena a raíz de una invitación que extendió Asomóvil a congresistas de la Comisión Sexta. Así mismo, porque hacía parte de una subcomisión que se conformó para sesionar desde la Heroica en el marco del congreso de Andicom.

Es decir, que aunque los costos los llevaba el gremio empresarial, Flórez asistió como representante de la rama legislativa para fortalecer las relaciones con empresarios, y no fue un viaje fortuito. Esto es clave por cuanto esa calidad lo obligaba a cumplir con un código de comportamiento correspondiente a su investidura y el deber funcional, aunque no se encontrara ejerciendo actividades legislativas.

“En la realización de la conducta, el señor Álex Flórez Hernández se presentó como senador de la República, es decir, dio a conocer su calidad de congresista y justamente poner de presente su investidura y consideración de su cargo, influyó en la forma en que los agentes atendieron el acto de servicio”, afirmó la procuradora.

La sala concluyó que “lo reprochable y lesivo para la función pública es la conducta que desplegó el senador en contra de otros servidores públicos que estaban ahí para cumplir con su deber de velar por la tranquilidad de la ciudadanía, con lo que claramente perturbó el deber funcional”.

“Las pruebas acopiadas acreditan que el senador atribuyó falsamente a tres patrulleros el hecho delictuoso del homicidio de tres jóvenes en el corregimiento de Chochó, al acusarlos como asesinos”, señaló la procuradora delegada en las consideraciones de la decisión. El congresista había hecho una profunda investigación para denunciar la masacre para el momento del escándalo.

La defensa dijo que la palabra “asesinos” no fue expresada en contra de un patrullero en particular, sino de la institución. Pero la sala disciplinaria desestimó ese argumento porque consideró que las grabaciones y declaraciones obtenidas daban cuenta de “constantes ofensas, trato humillante y calumnias lanzadas directamente contra los miembros de la fuerza pública que se presentaron en el hotel”.

En cuanto a la culpabilidad, la Procuraduría determinó que todas las pruebas indicaban que pese a la borrachera en la que se encontraba Flórez, era consiente de lo que estaba haciendo. “La condición de embriaguez no podía tenerse como presupuesto de inimputabilidad, por el contrario se afirmó que se contaba con elementos que permitían concluir que el senador tenía la capacidad para comprender la ilicitud del comportamiento y para determinar su actuar en el marco de dicha ilicitud”, sostuvo la delegada.

La sala corroboró con testimonios y videos que podía moverse sin necesidad de apoyo, incluso pudo tomar su celular para grabar un video, y sus palabras tenían coherencia en medio de la pele que había provocado con los policías. “Tan consciente era de lo que ocurría que al verse siendo grabado decidió hacer lo propio”, sostuvo la procuradora delegada. Esto a raíz de que el senador había alegado que todo el escándalo había sido provocado por su embriaguez e incluso que no recordaba lo ocurrido al día siguiente.

Aún así, la Procuraduría determinó que la conducta se realizó dolosamente, “es decir que el senador sabía lo que hacía, que lo que hacía es contrario a la ley y que quiso su realización. Conocía que los policías no habían participado de los homicidios que le estaban siendo endilgados, sin embargo, con clara voluntad de afectar su integridad moral los llamó en varias oportunidades asesinos, sabiendo de la falsedad de ese dicho y de la afectación moral de la integridad de los policías”, concluyó.

El senador Flórez Hernández aseguró que apelará el fallo, aunque reiteró que acepta los hechos que se le endilgaron en la decisión. “Acepto la responsabilidad del hecho y la sanción porque me la merezco. Haremos uso del recurso de apelación no para que se quite ni se me retire la sanción, sino para invitar a la señora procuradora que se revise el tiempo de la sanción. Quiero regresar cuanto antes al ejercicio de mi función”, señaló.