FMI pidió prudencia en las reformas del Gobierno de Gustavo Petro

La presidenta interina del Directorio Ejecutivo de la entidad, Antoinette Sayeh, aseguró que en Colombia los riesgos externos de la economía siguen siendo elevados con posibilidades de deterioro

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El Directorio Ejecutivo del Fondo Monetario Internacional (FMI) dio detalles de la actualidad económica de Colombia. Reuters.
El Directorio Ejecutivo del Fondo Monetario Internacional (FMI) dio detalles de la actualidad económica de Colombia. Reuters.

El Directorio Ejecutivo del Fondo Monetario Internacional (FMI) se refirió a la situación económica que vive el país, sobre todo por el ambienteGcon los proyectos de reforma a la salud, la laboral y la pensional que plantea el gobierno de Gustavo Petro.

Esto, luego de que el 26 de abril de 2023 concluyó la revisión para determinar que Colombia reúne los requisitos para el acuerdo de la línea de crédito flexible (LCF) y reafirmó que el país continúa satisfaciendo los criterios de acceso a los recursos de esta.

Y es que el acuerdo actual de dos años a favor de Colombia en la LCF es por un monto equivalente a USD9.800 millones, el cual aprobó el Directorio Ejecutivo del FMI el 29 de abril de 2022. Ante esto, las autoridades colombianas manifestaron su intención de continuar asignando carácter “precautorio” al acuerdo con la LCF.

Es de anotar que el primer acuerdo a favor de Colombia sobre la LCF se aprobó el 11 de mayo de 2009 y los acuerdos posteriores se aprobaron el 7 de mayo de 2010, 6 de mayo de 2011, 24 de junio de 2013, 17 de junio de 2015, 15 de junio de 2016, 25 de mayo de 2018 y 1 de mayo de 2020, que se aumentó posteriormente el 25 de septiembre de 2020 debido a la pandemia. Colombia hizo un desembolso de USD5.400 millones, en diciembre de 2020.

Al término de las deliberaciones del Directorio Ejecutivo sobre Colombia, la subdirectora gerente y presidenta interina del Directorio, Antoinette Sayeh, declaró que en este país hay fundamentos económicos sólidos.

“Colombia cuenta con fundamentos económicos y marcos de políticas muy sólidos anclados en un régimen de inflación objetivo creíble, un marco de política fiscal de mediano plazo sólido, un tipo de cambio flexible y una eficaz supervisión y regulación del sector financiero. Las autoridades están firmemente comprometidas a continuar con su historial de aplicación de políticas muy sólidas y mantener estas políticas en el futuro”, afirmó.

Aseguró que los riesgos externos siguen siendo elevados con posibilidades de deterioro. Además, que las condiciones financieras mundiales podrían endurecerse más con efectos negativos sobre los precios de las materias primas y el crecimiento. También, que un recrudecimiento de la guerra de Rusia en Ucrania podría perturbar los flujos comerciales y financieros.

“El contagio de la turbulencia del sector bancario internacional podría tener un impacto adverso en la estabilidad económica y financiera, aunque la continua y firme supervisión por parte de las autoridades moderaría estos efectos. A nivel interno, se necesitará poner especial atención en el diseño y comunicación prudente de las reformas estructurales. La línea de crédito flexible (LCF) ha contribuido a fortalecer la resiliencia de Colombia frente a choques externos y ha dado señales de la calidad de las políticas macroeconómicas de Colombia y de sus marcos institucionales”, explicó Antoinette Sayeh.

Destacó que tras una vigorosa recuperación posterior a la pandemia, la economía colombiana está experimentando una transición necesaria hacia una trayectoria de crecimiento más sostenible. De acuerdo con la funcionaria, el endurecimiento de las políticas macroeconómicas es el adecuado y debe mantenerse hasta reducir de forma duradera la inflación, fortalecer las finanzas públicas y resolver los desequilibrios externos.

El objetivo de las reformas

Según ella, mientras que los objetivos de la agenda de reformas estructurales para mejorar la igualdad, promover la diversificación económica y fortalecer la gobernabilidad son “encomiables”, una implementación cuidadosa y prudente será esencial para preservar la estabilidad fiscal y financiera y garantizar que los incentivos económicos estén bien alineados.

Enfatizó que el acuerdo de la línea de crédito flexible afianzó la confianza de los mercados y continuará haciéndolo, además que proporciona una salvaguarda adicional contra riesgos externos.

Asimismo. puntualizó que las autoridades tienen la intención de seguir con la asignación de a este acuerdo un carácter “precautorio” y de reducir de manera progresiva el acceso hacia una salida eventual, en la medida en que disminuyan los riesgos externos extremos.

“Continuar con la acumulación de reservas, cuando las condiciones lo permitan, fortalecería aún más la resiliencia”, finalizó la subdirectora gerente y presidenta interina del Directorio Ejecutivo del Fondo Monetario Internacional (FMI), Antoinette Sayeh.