“TransMilenio a la carta”: jóvenes cenaron con mantel, pasta y vino en el interior de un articulado

En los buses del TransMilenio –el medio de transporte más utilizado por los bogotanos– probablemente, ya se haya visto de todo. Celebridades disfrutando de la experiencia, pasarelas, fiestas, bailes exóticos, trasteos, relaciones sexuales, hurtos, expendio de drogas, violaciones, asesinatos y hasta el famoso cuidador de ratas que las alquila para ser acariciadas.

Sin embargo, entre sus sillas y barandas sigue habiendo quienes logran sorprender a los usuarios del sistema, este es el caso de un grupo de jóvenes –cuatro, para ser exactos– que, por razones desconocidas, decidieron instalar una mesa en el área para coches y sillas de ruedas, con un mantel, para darse un banquete.

Entre estación y estación, previo a llegar a su destino, decidieron aprovechar el tiempo como ningún otro pasajero, y adelantaron la cena, para disfrutar de pasta y vino, entre quienes –asombrados– continuaron su viaje, haciendo caso omiso de la peculiar escena que fue captada en una serie de fotografías, que se hicieron virales gracias a la publicación de la cuenta “Mi Bogotá bella”.

Con la descripción “TransMilenio a la carta”, usuarios, en redes sociales, iniciaron una conversación alrededor del extraño suceso:

“Lo que faltaba, ahora también tocará reservar para ingresar al Transmilenio”, “La gente si es más envidiosa, yo me les hubiera unido al banquete”, “De todo lo que he visto esto es lo más impresionante”, “ay que quitarles la amargura a los bogotanos”, “vino de la casa”, “Me gustaría conocer el contexto. Fijo fue que iban para la casa de alguno y la mamá no le dejó entrar a los amigos”, se lee en algunos comentarios.

Sin embargo, de acuerdo con la Empresa de Transporte del Tercer Milenio: “Está prohibido comer dentro del Sistema” y “si tienes hambre debes aplazar tu antojo, evita sanciones”.

Respondiendo a un usuario en Twitter, la compañía explicó: “quien consuma alimentos, bebidas, derivados del tabaco o sustancias prohibidas al interior de los buses o infraestructura del Sistema recibirá una multa”.

Aunque “a estas multas por comportamientos contrarios a la convivencia se les puede aplicar un descuento del 50% por asistencia a cursos pedagógicos, en un periodo de 5 días hábiles a la imposición de la multa”.

TransMilenio, lejos de ser un medio de transporte convencional, dejó en evidencia lo que pueden llegar a causar las canciones de Karol G en la gente. Y es que, hace unos meses se hizo viral un video en el que un grupo de pasajeros “azota baldosa” al ritmo de su famosa canción, junto a la artista trinitense Nicky Minaj, ‘Tusa’.

Pues bien, varios jóvenes se tomaron un articulado para calmar sus ansias de fiesta y en lugar del ‘cover’, pagaron la tarifa del TransMilenio, para disfrutar del baile, no bajo las luces de una discoteca. Bajo las luces blancas del bus.

En plena ‘hora pico’, lo que puede suponerse por la cantidad de personas que viajaban en el articulado, varias personas, que durante la última parada abordaron el vehículo, colocaron en un parlante el entonces hit.

La primera nota de la canción bastó para que hicieran una algarabía y empezaran a bailar, mientras se sostenían de los tubos para no caerse, una vez el bus avanzara.

Aunque resulte dificil de creer, varios de los pasajeros se unieron a la celebración y cantaron las canciones de la artista colombiana. Primero ‘Tusa’ y después ‘BICHOTA’, según los videos que fueron subidos a redes.

En TikTok, la “hazaña” del grupo de fanáticos recibió más de 132 mil vistas y cientos de comentarios en lo que llega a leerse:

“Catalogan a Colombia como uno de los países más felices del mundo ... yo sí lo creo”; “Colombia, donde se aburre el que quiere”; “¿Por qué a mi no me tocan esos?”; “tan lindos, amo la juventud que habita mi bella Bogotá, podemos estar cansados aburridos pero vibrando bonito”; “pongámonos de acuerdo y armamos otra TransmiParty”.