Ministro de Transporte insistió en que sí se puede modificar el contrato del metro de Bogotá

Guillermo Reyes señaló que el Gobierno y el Distrito trabajan en dos mesas técnicas para construir las condiciones en las que se podría construir la primera línea subterránea

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Guillermo Reyes en debate del Metro de Bogotá en el Congreso
Guillermo Reyes en debate del Metro de Bogotá en el Congreso

La discusión sobre el diseño del Metro de Bogotá continúa. Después de la polémica pública entre la alcaldesa Claudia López y el presidente Gustavo Petro, ambos habrían llegado a un acuerdo y ahora trabajan por definir las posibilidades para modificar el principal proyecto de movilidad de la capital del país.

La alcaldesa asegura que “el metro avanza” y señaló que se entregó la subestación eléctrica de calle 1ra con Caracas, que beneficiará a más de 200.000 personas, así como alimentar a la primera línea del Metro. El mismo lema que usó luego de anunciar el acuerdo con el presidente Petro respecto al proyecto.

El ministro de Transporte, Guillermo Reyes, aseguró al diario El Tiempo que “se ha logrado superar cualquier diferencia” respecto al proyecto del Metro de Bogotá. Según el funcionario, esta produjo porque se había acordado evaluar la modificación del contrato, pero la mandataria capitalina y el gerente de la empresa dijeron públicamente no se haría.

Reyes aseguró que los recursos de la Primera Línea del proyecto estaban garantizados con las vigencias futuras con los acuerdos de cofinanciación. Además, que el Gobierno honrará los compromisos y tiene previsto realizar los desembolsos para 2023 a 2026.

Sostiene, sin embargo, que la Nación es el financiador primario y por tanto tiene poder para “fijar su posición” en el proyecto. “Bien pueden los entes territoriales financiar el 100 por ciento de los proyectos que los mismos originan, en desarrollo de su autonomía, donde la Nación no tendría injerencia alguna”, afirmó el jefe de la cartera de Transporte.

Por esa razón crearon dos mesas técnicas, adicional a una de trabajo entre el presidente y la alcaldesa, para determinar cuál es la forma más viable para soterrar el tramo en construcción.

“Es importante destacar que para sustentar la petición de modificación del contrato, el Gobierno solicitó tres conceptos jurídicos, los cuales ofrecieron una conclusión en común: que la ley y los precedentes jurisprudenciales del Consejo de Estado sí permiten —bajo una serie de condiciones, como el consenso entre las partes— la modificación del contrato”, señaló Reyes a El Tiempo.

El Gobierno y la alcaldía continúan trabajando para modificar el contrato. Hay una mesa técnica y financiera que busca cuánto y de donde tomar recursos para adicionar el valor de la construcción, con base en el análisis que entregó el consorcio chino. A la par se lleva una mesa jurídica que lleva tres reuniones para ajustar el acuerdo a la norma.

El ministro de Transporte anunció que el director jurídico del Distrito presentará en una nueva reunión su concepto para la modificación del contrato. Con un acuerdo jurídico, contractual y financiero esperan viabilizar el soterramiento de la primera línea. Pero aunque han buscado dar celeridad al proceso, “no se trata de correr”, aseguró Reyes.

Desde el Concejo de Bogotá, el cabildante Oscar Ramírez radicó una solicitud para realizar una consulta popular, en las elecciones de alcalde, para consultar a los ciudadanos sobre qué diseño del Metro de Bogotá prefieren, si elevado como está propuesto para la primera línea o subterráneo como lo busca el presidente Petro.

Por otro lado, desde la bancada de la Colombia Humana, UP, contradicen a la alcaldesa y aseguran que las obras no llevan un 18% de avance, sino un 7.73% para noviembre de 2022, según el concejal José Cuesta, quien citó informes de interventoría.

“El sueño del Metro de Bogotá no tiene reversa, no se va a parar, nuestro Metro se sigue construyendo todos los días”, afirmó la alcaldesa en la entrega de la estación eléctrica. Señaló que el traslado de redes está próximo a completarse en un más de un 95% y el patio taller por encima del 70%.