Una de las historias más seguidas en el fútbol colombiano durante el presente mercado de fichajes es la del próximo destino de Teófilo Gutiérrez. El atacante barranquillero, que se desvinculó del Deportivo Cali tras finalizar su participación en la Liga Betplay 2022/II, estuvo vinculado a distintos clubes durante las últimas semanas y muy en especial con Atlético Bucaramanga e Independiente Santa Fe sin que se llegara a tener acercamientos concretos entre las partes.

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Con el que sí hubo conversaciones fue con el Unión Magdalena, que buscó hacerse con los servicios del atacante, ídolo de su rival Junior de Barranquilla, tras su desvinculación del cuadro azucarero.

A pesar de las informaciones que lo situaban en el Ciclón, el propio Teo se encargó de que la conversación pronto se diluyera, puesto que le exigía al presidente Eduardo Davila una serie de lujos que el club era incapaz de cumplir.

En un primer momento se supo que el delantero de La Chinita pedía un salario mensual de 100 millones de pesos, un valor bastante alto para las cifras que puede manejar un equipo tan modesto como el samario. Los directivos del Unión Magdalena habrían ofrecido 25 millones para convencer a Teo y alguna bonificación sin especificar, pero todo parece indicar que la oferta no habría dejado satisfecha la aspiración salarial del exdelantero de River Plate y la selección Colombia.

Sin embargo, todo parece indicar que las pretensiones del jugador no terminaban ahí. En el programa radial Junior A Un Click, el periodista José Hugo Illera, cercano al entorno de Junior de Barranquilla y de los jugadores de la costa Caribe colombiana; señaló que el ídolo del equipo tiburón también le pidió a los directivos del Ciclón disponerle un terreno en Santa Marta, con el fin de poder construir al frente del mar. También habría pedido usar sin restricciones uno de los yates personales y el helicóptero que le pertenecen a la familia Dávila, dueña del Unión Magdalena desde hace varias generaciones.

No conforme con dichas exigencias, se supo por boca de Eduardo Dávila que Teo habría aumentado sus exigencias luego de la goleada que sufrió el equipo samario el martes 31 de enero por 4-0 ante América de Cali. Lo anterior hizo que el dirigente decidiera no darle más vueltas al asunto y cerró definitivamente la posibilidad de tener al atacante en su equipo. En declaraciones para El Heraldo, el directivo se mostró tajante al respecto:

¿Qué sigue para <i>Teo</i>?

Con este panorama, ahora el barranquillero tendrá que evaluar cuáles serán sus siguientes pasos. Si su intención es quedarse en Colombia, tendrá que sentarse a hablar con los equipos interesados. Y en especial con el Atlético Bucaramanga, quien hasta ahora ha mostrado más interés en su contratación.

De hecho, a principios de la semana cuando se hicieron más fuertes los rumores de que no se llegaría a un acuerdo económico entre el jugador y Unión Magdalena, el presidente del cuadro leopardo, Jaime Elías Quintero, manifestó públicamente su deseo de contar con él para el presente campeonato. Sin embargo, no recibió respuesta por parte del delantero.

En lo que se refiere a Santa Fe, parece poco probable que intenten ir por él, especialmente cuando ya tienen a Hugo Rodallega en el equipo.

Por otra parte, siempre está en el aire la opción de buscar oportunidades en el exterior. Sin embargo, a la fecha ningún club extranjero ha manifestado interés de entablar conversaciones con el entorno del atacante.

A sus 37 años de edad, Teo ha vestido las camisetas de Junior, River Plate, Racing de Avellaneda, Arsenal de Sarandí, Lanús en Argentina, Sporting de Lisboa en Portugal y Cruz Azul en México, entre otros clubes. En su último club hasta la fecha, el Deportivo Cali, salió campeón en el 2021, pero el año siguiente fue más complejo para él debido a las diferencias que sostuvo con su entrenador, Mayer Candelo.