Ladrón no tuvo temor de Dios y robó a una monja en Bello, Antioquia

El delincuente huyó con una maleta en la que, al parecer, había una suma considerable de dinero, además de las pertenencias de la religiosa

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Ladrón no tiene compasión de Dios y robó a una monja en Bello, Antioquia.  (Colprensa)
Ladrón no tiene compasión de Dios y robó a una monja en Bello, Antioquia. (Colprensa)

Ni las religiosas se salvan de la inseguridad que sufre el departamento de Antioquia. En el municipio de Bello, una monja fue víctima de un violento robo a plena luz del día, cuando un hombre la intimidó con un arma de fuego para arrebatarle su bolso y celular.

Los hechos se ocurrieron el lunes 23 de enero en una heladería ubicada en el barrio El Carretero, norte del valle de Abrurrá. Las cámaras de seguridad del establecimiento grabaron al delincuente, que portaba un casco de motocicleta, mientras desfundaba el arma con el que intimidó a varias mujeres y luego se dirigió a la mesa donde estaba la monja.

Primero, el ladrón procedió a pedir objetos de valor a la hermana y a la mujer que la acompañaba, que entregó un celular sin necesidad de forcejear. Sin embargo, la religiosa mostró resistencia y quiso impedir el hurto, pero al final el delincuente se llevó todo.

En las imágenes quedó en evidencia el momento en el que el sujeto tomó los celulares y los guardó en el bolso como si fueran suyos. Antes de huir, agarró una maleta, en la que al parecer, la religiosa guardaba dos millones de pesos y salió sin prisa del establecimiento.

A pesar de que la cara del delincuente fue identificada, por el momento no se ha instaurado una denuncia formal por el incidente y las autoridades no han podido avanzar en las investigaciones correspondientes.

Esta indignante situación ha generado todo tipo de reacciones por parte de los ciudadanos, así como la preocupación por la frecuencia de estos casos de hurto en el Valle de Aburrá y la violencia con la que actúan los delincuentes.

El comandante de la estación de Policía Nacional del municipio de Bello, mayor Henry Jaramillo, entregó detalles de los hechos. “Se presentó un hurto cuando dos personas ingresan a departir dentro de un establecimiento e ingresa un tercero con un arma de fuego, los intimida y les roba las pertenencias. Invitamos a la comunidad para que hagan uso de la denuncia”, afirmó.

Además, Jaramillo solicitó a los ciudadanos del municipio que hagan uso de manera efectiva los canales de comunicación que están a su disposición para advertir sobre este tipo de situaciones.

Este caso da lugar a lo que se vivió el fin de semana en la capital de Antioquia, tres asesinatos de mujeres encendieron las alarmas de las autoridades de Medellín. Se trata de los homicidios de Erika Cuadros, Melisa Toro y Mariana Rueda el 20 y 22 de enero en tres barrios de la ciudad.

La profesora Erika Cuadros, de 32 años de edad, aparentemente habría muerto a causa de ser herida con arma blanca en un intento de hurto la noche del 20 de enero. Las versiones preliminares indicarían que la mujer transitaba por un puente en cercanías a la Estación del Metro Exposiciones en La 33 cuando fue abordada por los criminales. En este caso hay dos detenidos, un menor de edad de 17 años y una joven de 18, quienes serían presuntamente los responsables del delito.

Respecto a Melisa Toro y Mariana Rueda, ambas fallecieron el 22 de enero, Toro, de 28 años, habría sido herida con arma de fuego en la comuna 8, barrio Enciso. Por su parte, Mariana Rueda, de 25 años, habría recibido varios disparos con arma traumática cuando se encontraba en el barrio Villa Hermosa, también de la comuna 8.

Vale recordar que el lunes 16 de enero, el alcalde de Medellín, Daniel Quintero, en medio de su primer Consejo de Gobierno de 2023, anunció el aumento de recompensas por la captura de homicidas y además, resaltó el esclarecimiento de los asesinatos contra integrantes de la comunidad LGBTIQ+ y feminicidios en la capital antioqueña.

El mandatario local aseguró que por esclarecer el homicidio de una persona se podrán pagar hasta 100 millones de pesos y si se trata de un feminicidio, la recompensa será de hasta 200 millones de pesos.

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