Como Merlí y los peripatéticos, el peronismo apuesta a la filosofía

En 1949, entre el 31 de marzo y el 9 de abril se realizó en Mendoza el primer Congreso Nacional de Filosofía para los países de habla hispana. La idea fue de Juan Domingo Perón y ahora sus herederos tardíos quieren reeditarla en tiempos en que hasta los chicos recorren la historia de peripatéticos y otras corrientes de la mano de la serie catalana Merlí.

Con el PJ nacional intervenido y en manos de Luis Barrionuevo, los bonaerenses tomaron la idea original del general y ex presidente. Gustavo Menéndez, presidente del partido hasta diciembre cuando le pasará la posta a Fernando Gray, ya se reunió con 34 rectores de universidades nacionales y puso en manos de Ana Jaramillo, de la Universidad de Lanús, y de Aldo Carreras, vinculado con la Iglesia, la coordinación del Congreso.

Desde 1949 nunca más el peronismo organizó un congreso para discutir filosofía, ni siquiera lo hizo el propio Perón. Será entonces el segundo con una similitud y una diferencia: la fecha será exactamente la misma (31 de marzo al 9 de abril) pero cambiarán la sede, por infraestructura la remake será en Mar del Plata.

La ambición peronista propone juntar entre 60 y 70 filósofos y pensadores de Francia, germanos, sajones, del África, de China, de la India, de la escuela americana y de Argentina, obviamente, también. En agenda hay varios Premios Nobel y Noam Chomsky será uno de los invitados especiales. Incluso quieren sumar a presentar ponencias a "figuras del campo popular", anticipan.

Entre los temas a discutir está el hombre (en sentido genérico) y la tecnología, el hombre y la renta financiera, el hombre y la cultura del trabajo. "Hay que pensar unas 20 políticas de Estado más allá de los partidos políticos", dice Menéndez en plan de presentar a la filosofía con alcance social y llegada popular.