Macri, la UCR y el árbitro del Superclásico

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Antes de que Mauricio Macri recibiera a la nueva conducción del radicalismo el miércoles pasado, hubo un almuerzo clave en la quinta de Olivos. Mientras el Presidente visitaba la provincia de Entre Ríos, con el objetivo de mantenerse alejado de la marcha de Hugo Moyano, Marcos Peña recibía al titular de la UCR, Alfredo Cornejo, y al gobernador de Jujuy y vice radical, Gerardo Morales quienes ofrecieron un panorama optimista de la cumbre con diputados y senadores que había tenido lugar el día anterior en un hotel del barrio de Congreso.

Entre platos varios, entre ellos ojo de bife que saboreó el debutante presidente del radicalismo, conversaron sobre el pedido para reforzar el diálogo dentro de Cambiemos, uno de los mayores reclamos oídos en la UCR donde la venta de acciones de Transener,  la política contra la inseguridad y algunas públicas polémicas fueron morigeradas en conferencia de prensa.

Después se les sumó el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, recién llegado de territorio entrerriano junto al Presidente. Peña y Frigerio se despidieron del jefe radical y de Morales, aunque solo por un rato.

El mendocino y el jujeño se fueron de Olivos al comité de la calle Alsina donde hacía una hora los esperaban sus correligionarios de la mesa ejecutiva para la primera reunión de la nueva gestión. Allí Cornejo les transmitió que el Presidente los invitaba a Olivos y casi todos, más los jefes de los bloques de diputados y senadores, se fueron juntos a la residencia presidencial. Todos excepto el vicepresidente Federico Storani molesto al enterarse por teléfono sobre la realización de ese almuerzo previo del que no les comentaron una palabra durante la reunión.

Una vez en Olivos volvió el clima de distensión y hasta Cornejo se permitió una chanza al Presidente sobre la polémica que genera el arbitraje del Superclásico que se jugará en Mendoza el próximo 14 de marzo. "Voy a proponer un árbitro brasilero", le dijo el hincha de Godoy Cruz tras los cánticos en contra de Macri en la cancha de River por el pésimo arbitraje en el partido entre los millonarios y ese club mendocino.

Un dato: la "habilitación" del debate por el aborto no punible no fue comunicada en esa reunión y 24 hs después, anoticiados por los diarios, algunos radicales retomaron las quejas.