Por mejores precios, baja de costos y clima favorable, proyectan un aumento de la siembra de girasol

Un informe de pre-campaña elaborado por la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA), reflejó que la próxima siembra de girasol podría aumentar un 12,5%, en comparación con la campaña 2019/2020, y alcanzaría las 1.800.000 hectáreas. Además, se registraría un incremento del 8,2% si se tiene en cuenta lo sucedido en los últimos cinco años. Los especialistas atribuyen el incremento de la siembra de la oleaginosa a las buenas perspectivas climáticas, mejor relación insumo/producto y favorable escenario de precios internacionales.

“Hay una clara intención de expandir el área con girasol, explicada principalmente por una favorable relación insumo/producto, las perspectivas climáticas que anuncian un año niña (es decir, con precipitaciones acumuladas por debajo del promedio), bajo las cuales el girasol presenta un mejor desempeño en comparación a otros cultivos de verano”, manifestaron los técnicos de la Bolsa porteña.

En la Bolsa de Cereales de Buenos Aires ya cuentan con resultados preliminares que muestran en el norte del país, principalmente el NEA, una mejora de la humedad superficial durante la ventana de siembra y a partir de eso se espera una importante recuperación de área no solo por una mayor intención de siembra, sino también por un crecimiento de la oferta de lotes que inicialmente estaban destinados a la siembra de trigo y que por falta de humedad hasta ahora no pudieron ser incorporados en la rotación. Por su parte, en las provincias de Buenos Aires y La Pampa se perfila también a expandir el área de la mano de precios favorables.

No obstante, si bien el escenario se muestra alentador, la actual proyección de superficie queda sujeta principalmente a la evolución de variables climáticas y de mercado durante la ventana de siembra, la cual va desde principios de agosto hasta mediados de septiembre en las regiones agrícolas del centro y norte del país, y se reactiva a partir de octubre en los núcleos girasoleros del sur extendiéndose hasta principios de diciembre.

Precios y costos

El informe, además, recuerda que el mayor demandante de la oleaginosa es la industria molinera que en las últimas cinco campañas fue el destino del 90% de la producción, con el aceite como el principal producto, al punto que contribuye casi excluyentemente a la formación del precio del grano. “El resto, principalmente harina de proteína vegetal, se vende como insumo forrajero y tiene menor impacto en su cotización”, señalaron desde la Bolsa de Cereales de Buenos Aires.

En lo que respecta a los precios, los mismos en los puertos argentinos tuvieron un promedio en la primera mitad del presente mes de 758 dólares por tonelada. Se trata del valor más alto de los últimos tres años, y un 6% más que en el mismo período del año pasado. “Por su elevada correlación, los precios del girasol muestran el mismo comportamiento que el aceite y se ubican por encima de los valores registrados en el mismo período de la campaña anterior”, destacó el informe.

Por otro lado, los costos de producción presentan un contexto de profundización de la baja de los insumos más importantes para la producción de la oleaginosa. Los insumos relacionados con el precio del petróleo registraron considerables bajas como el caso de los combustibles (-18 %), urea (-13 %) y fosfato diamónico (-13 %). “Se observa una mejora en la relación insumo-producto respecto a la campaña previa e incluso al promedio de las últimas cinco campañas”, explicaron los técnicos de la BCBA.

Seguí leyendo: