Para la Bolsa de Comercio de Rosario, “las cuestiones fiscales provocan preocupación y decepción”

En el marco del remate del primer lote de soja realizado ayer en la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), representantes de la entidad y funcionarios nacionales y provinciales destacaron el esfuerzo realizado por los productores e integrantes de las cadenas de cultivos. Especialmente por superar un 2018 afectado por la sequía y atravesar un momento actual de cara a una campaña agrícola que podría superar las 140 millones de toneladas, pese a la actual incertidumbre económica, financiera y electoral.

El acto contó con la participación del gobernador de Santa Fe, Miguel Lifschitz; el subsecretario de Mercados Agropecuarios de la Secretaría de Agroindustria de la Nación, Jesús Silveyra; la ministra de la producción de Santa Fe, Alicia Ciciliani; la intendenta de Rosario, Mónica Fein; el presidente de la BCR, Alberto Padoán y directivos de Bolsas y Cámaras Arbitrales, entre otros referentes del sector agropecuario y agroindustrial.

Padoán sostuvo que "más allá de las cuestiones fiscales que afectaron en particular al complejo oleaginoso -como la eliminación del escalonamiento arancelario para productos industrializados-, que además provocan preocupación y decepción, el sector productivo respondió con una notable cosecha que constituirá un nuevo récord histórico", comentó. Además, pidió al gobierno que proteja el valor agregado.

Por su parte el subsecretario de Mercados Agropecuarios de la Secretaria de Gobierno de Agroindustria, Jesús Silveyra, dijo: "Gracias al esfuerzo de los productores y del resto de la cadena agroindustrial, creció el uso de fertilizantes, la renovación de la maquinaria, logrando un mejor uso y conservación del suelo como consecuencia de la rotación por la mayor siembra de gramíneas".

Al referirse al presente de la campaña agrícola, Lifschitz comentó: "Sería un error pensar que los números récord de cosecha tienen que ver solamente con el clima. Sin dudas hay otros factores que hacen posibles estos resultados y tienen que ver con un sector agropecuario muy competitivo, que realzó inversiones durante muchos años en cada uno de los eslabones de la cadena de valor para mejorar la competitividad".

Frente a un difícil panorama por los efectos del cambio climático, Alberto Padoán habló de la necesidad de contar con coberturas que permitan mitigar el daño económico provocado por los fenómenos climáticos, los cuales frenan la planificación a largo plazo y excluyen a los productores.

El presidente de la bolsa rosarina también se refirió a la implementación de instrumentos que sirvan de complementación económica de acuerdo a la superficie afectada. El dirigente propuso realizar una prueba piloto en Santa Fe para todos los cultivos intensivos.

Además, el titular de la BCR cuestionó la demora por la ejecución de algunas obras en la red de accesos a los puertos del Gran Rosario, por donde sale al mundo más del 70% de la cosecha, y agregó: "En esta campaña ingresarán a dicha zona más de 2 millones de camiones y seguimos teniendo problemas de logística e infraestructura, y la misma red vial que generan diferentes cuellos de botella".

El representante del gobierno nacional, Jesús Silveyra, puntualizó que "hay que volver a incrementar la producción atendiendo los problemas de calidad que se presentan, impulsando la biotecnología. Debemos abastecer y mantener un buen nivel de ocupación de nuestra industria y transformar nuestros productos en carnes, en biocombustibles y en productos con mayor valor agregado".

Luego de los discursos, se realizó el remate del primer lote de soja de la presente campaña: un acto simbólico que marcó el comienzo de la comercialización de la oleaginosa.

La firma Intagro Cereales S.A. fue la ganadora de la puja: pagó $ 27500 la tonelada y triplicó los $ 9100 de la pizarra, que fueron la base de la subasta. El primer lote, que fue descargado en la planta de Vicentín de Ricardone, era de 22,2 toneladas de variedad Syngenta 5×1, producido en la localidad formoseña de Potrero Norte. El dinero aportado por la firma ganadora será donado a una escuela rural de Potrero Ñandú, en Formosa, para la construcción de nuevos sanitarios.