Nuevas condiciones para la faena: a partir de marzo serán obligatorios los controladores electrónicos

La normativa regirá a partir del primer día del siguiente mes. Aquellos que no tengan instalados los equipos no podrán seguir con la actividad

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Uno de los objetivos de esta nueva normativa es reducir la evasión.(Getty)
Uno de los objetivos de esta nueva normativa es reducir la evasión.(Getty)

Los frigoríficos y mataderos que desde el 1 de marzo de 2018 no hubieran adquirido e instalado los Controladores Electrónicos de Faena (CEF), no podrán operar en el mercado doméstico y deberán cesar en su actividad.

Estos requerimientos forman parte del alcance planeado por la resolución 3E promovida en el 2017 por el gobierno nacional donde se establecen las pautas obligatorias que deberán imponerse para la faena bovina y porcina. A través del uso de cámaras de video y una balanza en el palco de tipificación o en cada balanza, en caso de haber más de una, se verificarán los kilos y categorías de la hacienda faenada.

La normativa en cuestión cuenta con el aval de la Mesa de Carnes, integrada por más de treinta entidades del sector y se considera como inamovible la fecha para promover la instalación de los mencionados controladores.

De esta manera, se apuesta desde el ámbito oficial y privado para reducir la evasión en el sector entre otros aspectos

La semana pasada, la Mesa, tal como lo informó la Sociedad Rural Argentina, se reunión por este tema con Guillermo Bernaudo, secretario de Agricultura y Ganadería de la Nación, y con Marcelo Rossi, hoy director de Control Comercial. El objetivo central de la reunión fue analizar los avances alcanzados en el programa para eliminar la informalidad en el sector cárnico.

Los CEF serán así un sistema conformado por el uso de cámaras de video y balanzas, los cuales deberán estar sincronizados, para permitir la verificación de aquellos datos que hacen a la verificación del kilaje de la producción faenada por frigoríficos y mataderos de todo el país.

Los datos deberán ser transmitidos en tiempo real por las empresas privadas, de modo encriptado, a un centro de monitoreo que estará bajo la órbita de la Dirección de Control Comercial Agropecuario

Desde el 1 de marzo los 380 frigoríficos bovinos que, de acuerdo al SENASA, operan en el país deberán contar con sus respectivos CEF. "Aquellos establecimientos que trabajen por debajo del kilaje establecido por ley, deberán abonar una multa de $10.000 por cada animal faenado en esas condiciones"

Otro de los puntos establecidos por el Gobierno es la constitución de un Fondo de Garantías, que los frigoríficos deberán efectuar en el Banco Nación, en concepto de garantías por pagos del IVA, Seguridad Social y futuras multas. La medida generó algunas resistencias en establecimientos de baja escala, pero será obligatoria para poder operar.

Tal como indicaron desde la Sociedad Rural Argentina, al confirmar el encuentro que referentes del sector privado mantuvieron días atrás con Bernaudo y Rossi, en línea con el compromiso asumido por toda la Mesa de Carnes ante el presidente Mauricio Macri, quien no demuestre fehacientemente haber adquirido los equipos al 28 de febrero -para hacer efectivo los controles- no podrá faenar ganado bovino.

Desde la SRA detallaron que: "El cumplimiento de esta obligación será sin excepción para todo el universo de establecimientos de faena, sin distinción ni exclusión por tamaño, categoría o localización".

En otro orden, el sector ganadero argentino empezó el año con buenas noticias tanto en el mercado interno como a nivel comercio exterior. Las reuniones que en 2017 mantuvo la cadena de ganados y carnes con el Gobierno, en el marco de las mesas sectoriales empiezan a arrojar resultados positivos.

Ya en el 2017, se registró un importante repunte de la actividad de faena vacuna, con unas 12,5 millones de cabezas que pasaron por frigoríficos y mataderos, según indicó la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes y Derivados de la República Argentina (CICCRA).