Los suicidios de presos como el de Jeffrey Epstein están aumentando, y son predecibles

Las tasas de presos federales muertos por suicidio comenzaron a incrementarse a partir de que la administración Trump recortó 5.156 oficiales y puestos de personal a través de una congelación de contratación y recortes presupuestarios, lo que significó una reducción del 14 por ciento.

La tasa de suicidios continuó incrementando a medida que aumentaron las vacantes de personal y se hicieron recortes permanentes en 2018, con más de dos docenas de presos que se quitaron la vida cuando el personal de la prisión y los líderes no pudieron frenar el problema creciente.

Los suicidios como el del presunto delincuente sexual Jeffrey Epstein, que se ahorcó mientras estaba solo en un centro de detención federal este mes, son predecibles dadas las condiciones en que se encuentran los 122 centros de detención federales, dijo el senador Richard J. Durbin (demócrata por Illinois); el segundo demócrata de más alto rango.

"He tratado repetidamente de hacer sonar la alarma sobre estas amenazas a nuestro sistema penitenciario federal, pero solo he sido ignorado", dijo Durbin en una declaración preparada al Washington Post. "Es inaceptable que se haya tomado el suicidio de un preso notorio para obligar al Departamento de Justicia de Trump a que finalmente preste atención".

Los funcionarios de la Oficina de Prisiones de los EEUU dijeron que eliminaron los puestos de oficiales y personal en un esfuerzo por "corregir el tamaño" de la oficina, ya que los cambios en las pautas de sentencia y otros factores han llevado a una disminución en el número de reclusos.

Las tasas de suicidio aumentaron de 8.1 por cada 100,000 presos federales en el año fiscal 2016; a 14.7 por cada 100,000 presos en el año fiscal 2018. Sesenta y seis presos se quitaron la vida durante ese tiempo.

Miembros demócratas del Congreso y personal penitenciario dicen que las cárceles federales tienen poco personal. Esto envalentona a los prisioneros, dicen, causando que rompan más reglas y que en consecuencia los lleven a una vivienda especial y de confinamiento estricto. El aislamiento de los reclusos hace que los problemas de salud mental aumenten.

Incluso con los bajos niveles de personal que se establecieron en 2017, la oficina tiene 1,652 vacantes disponibles para oficiales correccionales.

"La administración tiene que verse en el espejo", dijo Joe Rojas, vicepresidente regional del sudeste del Consejo de Locales Penitenciarios. "Ellos causaron esto. Han destruido el entorno de las cárceles. No es el trabajo que era antes; la gente ya no quiere trabajar aquí".

Brandon Sample, un ex prisionero que se convirtió en abogado de defensa criminal, dijo que la falta de personal no es el único problema. Incluso con el personal actual, dijo Sample, los oficiales correccionales frecuentemente omiten las caminatas que se supone que deben hacer por las salas para controlar a los prisioneros. Él aboga por equipar a los oficiales con cámaras corporales para vigilarlos.

"Así actuaron con Epstein, con guardias que no hacen su ronda y falsifican documentos para encubrirlo. Es no es algo inusual", dijo Sample. "Esto sucede todo el tiempo. Simplemente no lo hacen. Se sientan en sus oficinas y no salen ".

Se suponía que Epstein debía ser revisado cada 30 minutos, pero no fue así. Además, al menos ocho empleados sabían que se habían dado instrucciones estrictas para no dejar a Epstein solo en su celda, sin embargo, la orden aparentemente fue ignorada en las 24 horas previas a su muerte, informó The Post.

El Departamento de Justicia está investigando si los oficiales se saltaron los patrullajes y dijo que está trabajando para abordar los problemas de falta de personal. El primer paso, dijeron, fue cambiar el liderazgo en la oficina, trayendo de vuelta a Kathleen Hawk Sawyer, quien anteriormente se desempeñó como directora de la oficina de 1992 a 2003.

"Contratar oficiales correccionales adicionales es una prioridad para el Procurador General y el Director . Ambos están trabajando estrechamente en este tema", dijo el departamento en un comunicado.

El personal de las correccionales federales está frustrado. En los últimos dos años, han advertido que la falta de personal está obligando a los oficiales a trabajar rutinariamente en turnos de 16 horas, y debido a que eso no es suficiente para el personal de las cárceles, las secretarias, los conserjes y los electricistas del buró ahora están haciendo patrullas regulares.

Los funcionarios de la oficina no respondieron preguntas sobre el papel que podría desempeñar la dotación de personal en los suicidios, pero dijeron que podría haber otros factores que contribuyen, como el acceso a las píldoras o navajas de afeitar.

Personal sustituto 

En lo que va del año fiscal, al menos 23 presos se han suicidado, según datos federales y suicidios confirmados por The Post. Dos de los internos murieron después del suicidio de Epstein. El año fiscal termina el 30 de septiembre.

David Fathi, director del Proyecto Nacional de Prisiones de la ACLU, dijo que las condiciones han empeorado, sin ninguna protesta pública, porque la sociedad ha "señalado" en gran medida a los presos y no equipara la seguridad de la prisión con la seguridad pública.

"Debido a que son solo prisioneros, a nadie le importa, no hasta que le sucede a alguien de alto perfil. Les aseguro que lo que sucedió con Epstein es completamente típico".

El sábado pasado, un preso se quitó la vida en el Centro Federal de Detención en Miami, que era similar al de Epstein. Pedro René González, de 43 años, murió después de ahorcarse con su sábana. González era un delincuente que enfrentaba cadena perpetua por cargos de armas.

Aunque algunos miembros del personal reciben capacitación, no están en las unidades todos los días, lo que significa que no han desarrollado relaciones con los reclusos ni han aprendido cuáles son los patrones y comportamientos normales.

Eric Young, el ex presidente inmediato del sindicato de oficiales correccionales, dijo que los reclusos a menudo terminan en celdas especiales después de intentar contrabandear drogas o armas, algo que está en aumento debido a la falta de personal, dijo.

Menos oficiales significan menos patrullas en los terrenos de la prisión, menos "revisiones" de los reclusos en los pasillos y menos registros en las celdas. Sabiendo esto, los reclusos se han vuelto más atrevidos, dijo.

Craig Haney, psicólogo social y profesor de la Universidad de California en Santa Cruz, ha estudiado el impacto del aislamiento de la prisión desde la década de 1970 y dijo que estas condiciones pueden exacerbar los problemas de salud mental o incluso crearlos.

Las celdas de prisión de los reclusos en confinamiento solitario y viviendas especiales son típicamente tan grandes como un espacio de estacionamiento estándar o una cama extra grande, dijo Haney. Cuando se les permite salir al aire libre durante una o dos horas al día, se los lleva a un área de ejercicio enjaulada que con frecuencia es aproximadamente del mismo tamaño y cuenta con poco o ningún equipo de ejercicio, dijo.

"Los ves caminando casi como animales en un zoológico", dijo. "Muchos prisioneros me han dicho: 'Voy de una celda a otra".

Cuando los reclusos que viven en esta vivienda se vuelven suicidas, a menudo es difícil para el personal de la prisión saberlo.

Las visitas con los psicólogos de la prisión a menudo no duran más de cinco minutos, dijo Haney, y las sesiones de terapia a menudo tienen lugar a través de una ranura o grieta en la puerta de la celda del interno donde las conversaciones pueden ser escuchadas por otros internos y oficiales correccionales.