Tres oficiales de Miami acusados de ayudar a traficantes de cocaína a cambio de dinero

Por Deanna Paul

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Los oficiales de la policía de la ciudad de Miami Schonton Harris, Kelvin Harris y James Archibald tras ser arrestados (Captura CBS Miami)
Los oficiales de la policía de la ciudad de Miami Schonton Harris, Kelvin Harris y James Archibald tras ser arrestados (Captura CBS Miami)

Tres agentes de policía de Miami se enfrentan a cargos federales por narcóticos tras aceptar dinero a cambio de protección policial en una operación de distribución de cocaína y opiáceos.

Hace unos días se dio a conocer una denuncia penal tras una operación del FBI que culminó con el arresto de los oficiales Schonton Harris, Kelvin Harris y James Archibald.

Los policías fueron acusados de conspiración por poseer cocaína con la intención de distribuir, intentar poseer cocaína con la intención de distribuir y usar un arma de fuego durante esa operación y de un delito de narcotráfico, que son delitos penales federales.

"Nadie, ni siquiera un oficial de policía, está por encima de la ley", comentó en la conferencia de prensa Ariana Fajardo Orshan, fiscal federal para el Distrito Sur de Florida, que asumió el cargo el mes pasado. Ella subrayó que los agentes tenían el deber de investigar, denunciar y ayudar a procesar a las personas implicadas.

"A veces tenemos malas semillas en los cuerpos y fuerzas de seguridad. Los oficiales que deshonran su placa y que ponen en peligro al público serán llamados a responder por los delitos que cometen", agregó.

Según la denuncia, Schonton Harris planteó el esquema.

Ariana Fajardo Orshan, Fiscal Federal para el Distrito Sur de Florida (Captura: CBS Miami)
Ariana Fajardo Orshan, Fiscal Federal para el Distrito Sur de Florida (Captura: CBS Miami)

En una conversación grabada, accedió a actuar como escolta policial de un servicio de mensajería de drogas. "Supuestamente estaba recolectando los ingresos de medicamentos de farmacias y clínicas que se dedicaban a la venta ilegal de opiáceos y luego manejaba a un banco para depositar dichos ingresos", señaló.

Eso sucedió varias veces entre mayo y junio. En julio, según la denuncia, Harris escoltó lo que ella creía que era un envío de 2.000 píldoras de opiáceos y varios kilos de cocaína a través de Miami.

La operación encubierta se expandió el mes siguiente cuando Harris se reunió con un agente encubierto del FBI que se hacía pasar por un miembro de alto rango de una organización de narcotráfico, según la documentación oficial.

Luego, Harris presuntamente reclutó a los otros dos agentes.

Los tres actuaron como escoltas de seguridad para los traficantes de droga y los mensajeros de lavado de dinero a cambio de dinero en efectivo. En una ocasión, incluso transportaron personalmente 30 kilos de ladrillos de cocaína simulada. Schonton Harris, Kelvin Harris y Archibald supuestamente recibieron USD 17.000, USD 10.000 y USD 6.500 en sobornos.

La denuncia indica que Schonton Harris, que admitió haber usado y vendido narcóticos mientras trabajaba y que manipuló pruebas de drogas del departamento de policía, también vendió un uniforme y una insignia de policía de la ciudad de Miami a un agente encubierto del FBI por USD 1.500, sabiendo que sería utilizado para golpear a un hombre que había robado drogas al traficante.

Los oficiales estatales y federales trabajaron conjuntamente para cerrar el caso de corrupción pública.

"Espero que estos arrestos sirvan de advertencia", comentó el jefe de la policía de Miami, Jorge Colina, "porque los oficiales que traicionan la insignia serán responsables". "No hay ningún refugio para ellos. Si usted es corrupto, lo encontraremos y responderá por sus delitos. Ese es el compromiso del Departamento de Policía de Miami con cada residente de la ciudad".