El Grupo de Alto Nivel enviado por la Organización de Estados Americanos (OEA) para oír a los protagonistas de la crisis política peruana ha emitido su informe final y las reacciones de los implicados no se hicieron esperar. Desde el Ejecutivo, el presidente Pedro Castillo, señaló que la misión ratificó la existencia de ataques desestabilizadores por parte de un grupo político, pero esta es una interpretación que no tiene en cuenta las conclusiones generales del texto.
Entre sus hallazgos, el Grupo de Alto Nivel hace mención a la inestabilidad democrática impulsada por factores como la obstaculización del ejercicio del poder. Además resalta la existencia de acusaciones y señalamientos que no solo provienen del Poder Legislativo, sino también del Ejecutivo dirigido por el propio presidente Pedro Castillo. Por ello, resulta impreciso señalar que el informe menciona solo a la oposición en el Congreso.
“Entre los poderes del estado existen acusaciones y señalamientos de que el riesgo de gobernabilidad reside en el otro poder y no en ellos mismos. Cada poder del Estado responsabiliza a los demás de provocar falta de gobernabilidad. El Grupo de Alto Nivel escuchó con preocupación expresiones como “en Perú no hay pronóstico reservado” y “la democracia peruana está en cuidados intensivos”.
Sobre la existencia de un grupo político que desconoce el voto popular, el texto presentado ante el Consejo Permanente hace mención a sectores que, tras la elección de Pedro Castillo en la elecciones generales del 2021, promueven el racismo y discriminación. No se especifica si se refiere únicamente a sectores políticos o civiles, aunque durante los últimos meses se han visto actitudes de ese tipo proveniente de ambos.
“Varios actores entrevistados denunciaron que la elección del presidente Pedro Castillo puso de manifiesto que existen sectores que promueven el racismo y la discriminación y no aceptan que una persona ajena a los círculos políticos tradicionales ocupe la silla presidencial. Eso se ha traducido en improperios e insultos hacia la imagen del presidente”, se lee en uno de los apartados.
El texto no señala que se pretenda vulnerar la decisión de los peruanas y peruanas adoptada en las últimas elecciones generales, pero sí resalta que existe un uso indiscriminado de las mociones de vacancia. Esta forma parte de la larga lista de herramientas de control político que han sido usadas de manera excesiva por parte de los actores políticos.
Informe presentado
La misión de alto nivel de la Organización de Estados Americanos (OEA) pidió este jueves a Perú convocar un diálogo e iniciar una tregua política para superar la crisis de gobernabilidad que atraviesa el país.
El grupo, que arribó la semana pasada, presentó su informe preliminar ante el Consejo Permanente de la OEA, en el que dio una serie de recomendaciones y un análisis sobre la situación actual en Perú.
El documento fue leído por el excanciller peruano Eladio Loizaga. Aunque aún no ha sido publicado, pidió a los actores políticos peruano convocar un diálogo formal entre “la presidencia, el legislativo, las altas cortes” y otras partes implicadas.
Según el informe, este diálogo debe ser independiente y podría ser apoyado por una organización internacional si “así lo consideran” las partes. Mientras se convoca, el grupo recomienda llamar a una tregua política de 100 días para que el presidente Pedro Castillo y su equipo político puedan llevar adelante su plan de gobierno.
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