Del Pacto Suicida a una Iniciativa Estratégica de Defensa

En esta era de guerras asimétricas los enemigos de Estados Unidos ensayan nuevos métodos de ataque diseñados para horadar las instituciones e inutilizar el instrumento militar

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Del Pacto Suicida a una Iniciativa Estratégica de Defensa
Del Pacto Suicida a una Iniciativa Estratégica de Defensa

En 1983 Ronald Reagan anunció un giro en las políticas de contención de la Unión Soviética denominada la Iniciativa de Defensa Estratégica (ISDI). Esta tesis pondría fin a lo que Reagan denominaba “el pacto suicida” encarnado en la noción de Destrucción Masiva Mutua Asegurada (MAD) que había regido los intercambios con la potencia rival desde la década de los años cincuenta. LA SDI planteaba crear alrededor del territorio norteamericano un anillo de defensa espacial capaz de destruir cualquier misil nuclear antes de llegar a su destino. La SDI no llegó a instrumentarse, aun cuando se invirtieron USD 30.000 millones en su desarrollo. Pero su lanzamiento e impulso forzó a la Unión Soviética a invertir recursos que no tenia en replicar el sistema y ello la llevo al colapso.

Hoy las probabilidades de un ataque nuclear masivo contra Estados Unidos se han desvanecido, mas no así las intenciones de sus enemigos de atacarle y debilitarle. De allí que en esta era de guerras asimétricas los enemigos de Estados Unidos ensayen nuevos métodos de ataque diseñados para horadar las instituciones e inutilizar el instrumento militar. Para el 2022 uno de esos métodos promete tener protagonismo. Se trata el de usar el escudo centro americano como plataforma de lanzamiento de misiles. Pero en este siglo 21 no se trata de cohetes sino de seres humanos que los gobiernos de Nicaragua y de Honduras principalmente lanzarán hacia el norte con la idea de provocar un caos legal, político e institucional en el sur de los Estados Unidos.

La maniobra comenzará con permitir el acceso libre de cubanos a Nicaragua y a Honduras. Esos cubanos que pueden ser decenas de miles, se mezclarán con los migrantes de Nicaragua, Honduras y Guatemala para ingresar en Estados Unidos.

Dado que la legislación de Estados Unidos otorga un trato preferencial a los cubanos esas hordas ingresaran a Estados Unidos con relativa facilidad.

El régimen cubano experimentará una reducción de la presión popular por la mejora en las condiciones de vida. En los Estados Unidos la población local se molestará ya que el país apenas se recupera de la crisis económica generada por el covid-19 , la aceleración de los procesos de digitalización catapultados por la pandemia. Así han desaparecido muchos empleos tradicionales y los servicios públicos han experimentado una caída libre en términos de calidad y cobertura. Bajo estas circunstancias la población de Estados Unidos está en ánimo de bunkerización que es aislacionismo con reducción de presencia militar y corporativa en el mundo. Por tanto, un alud de inmigrantes colocaría en aprietos a cualquier gobierno en Estados Unidos.

Por otra parte, el número y frecuencia de los migrantes estacionados en la frontera con México para solicitar asilo servirá para paralizar a las autoridades migratorias que no podrán hacer otra cosa distinta a procesar los casos aun cuando sea para negarlos. Por otra parte, la estrategia de uso de seres humanos como misiles también debilita a las naciones de paso con lo cual las fuerzas del llamado socialismo del siglo 21 ven oportunidades de crecimiento.

Las naciones de paso han concluido con Estados Unidos lo que Ronald Reagan llamaría un pacto suicida para contener a los migrantes. Y las medidas de contención van desde el expolio hasta el uso de los migrantes para avanzar los intereses del crimen organizado transnacional. Así se debilita el ya enclenque estado de derecho, se violan los derechos humanos y se condena una significativa proporción de centro americanos a la esclavitud en manos del crimen organizado que, a su vez, debilita las instituciones democráticas en Estados Unidos y en los países de paso.

Enfrentar esta amenaza demanda creatividad por parte del establishment de política exterior de Estados Unidos. Porque la única forma de inutilizar los misiles humanos es absorbiéndoles en el sistema estadounidense. Y para que esto ocurra hay que modificar el enfoque que se le esta dando a la inmigración. Porque Estados Unidos está iniciando el cuarto redespliegue industrial de su vida como nación y para que las nuevas formas de creación riqueza prosperen hay que mantener en equilibrio el costo e la mano de obra. Los migrantes enriquecerían el esfuerzo de inversión de las corporaciones norteamericanas si fuesen dirigidos a los bolsones de desarrollo post industrial que están comenzando a aparecer en el sur de los Estados Unidos. Esta política acompañada de inversiones para la creación de manufacturas en los países de Centro América que aún no han caído víctimas del socialismo del siglo 21 como es el caso de Costa Rica, Guatemala y el Salvador comenzaría a reducir la intensidad del éxodo al tiempo que se fortalece la economía de Estados Unidos. Sería un enfoque de defensa constructivo ante un ataque asimétrico.

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