El régimen de Irán mantuvo el tono duro contra los manifestantes y reconoció 60 muertos desde el inicio de las protestas

El régimen de Irán se mantuvo firme frente a los manifestantes que protestan por la muerte de la joven Mahsa Amini detenida por la policía de la moral, a pesar de los llamamientos de la comunidad internacional para poner fin a la represión que ha dejado decenas de muertos desde hace 11 días.

Según un último balance dado el martes por la agencia de noticias iraní Fars, “unas 60 personas murieron” desde el inicio de las manifestaciones el 16 de septiembre.

La policía, citada por la agencia oficial Irna, informó de la muerte de 10 agentes, pero no estaba claro si estos se encontraban entre los 60 muertos.

El anterior balance oficial era de 41 fallecidos en las manifestaciones.

La ONG Iran Human Rights (IHR), con sede en Oslo, informó el lunes por la noche de “al menos 76 muertos”, entre ellos “seis mujeres y cuatro niños”, afirmando haber obtenido “videos y certificados de defunción que confirmaban los disparos con munición real contra los manifestantes”.

Para los dirigentes iraníes, los manifestantes son “alborotadores”.

En los últimos días, el presidente iraní Ebrahim Raisi ha pedido a las fuerzas del orden que actúen “firmemente contra quienes atentan contra la seguridad del país y del pueblo” y el jefe del poder judicial, Gholamhossein Mohseni Ejei, excluyó toda “indulgencia” contra los instigadores de los “disturbios”.

Por su parte, un legislador conservador en Irán criticó duramente el martes a las manifestantes mujeres que se han quitado los pañuelos obligatorios, calificándoles de prostitutas.

Las duras palabras usadas por Mahmoud Nabavian, un legislador de Teherán, contrastan marcadamente con el pedido de un importante clérigo islámico, el gran ayatolá Nouri Hamadani, que el domingo llamó al gobierno a escuchar las demandas del pueblo.

La suerte de Mahsa Amini, una kurda iraní que murió tras ser detenida por la policía de moralidad presuntamente porque llevaba el velo islámico demasiado suelto, ha desatado protestas en todo Irán. Las manifestaciones se han extendido a al menos 46 ciudades, incluyendo la capital, pueblos y aldeas. Desde hace años el país no ve semejantes escenas de violencia y choques callejeros con la policía.

Manifestaciones de solidaridad se han realizado además en Estados Unidos, Canadá, Europa y partes del Oriente Medio. En la ciudad siria de Qamishli, predominantemente kurda, miles de mujeres salieron a las calles el lunes, llevado carteles con la foto de Amini.

En Irán, mujeres comunes y figuras públicas, incluyendo actrices, se han quitado los pañuelos en protesta o se han cortado el cabello en público para mostrar su solidaridad con las manifestaciones.

La agencia noticiosa estatal IRNA reportó el martes que Hassan Bahramnia, gobernador de la provincia occidental de Ilam, cerca de la frontera con Irak, indicó que las fuerzas de seguridad han arrestado a 180 manifestantes. Agregó que algunos han sido dejados en libertad.

“Esas manifestantes están saliendo a prostituirse”, dijo el legislador Nabavian, citado por el portal noticioso Fararu. Insinuó que quitarse el hiyab equivalía a desnudarse en público para atraer la atención de los hombres. Los hombres y las mujeres que participan en las protestas, dijo, son culpables de “impurezas” que tienen que ser “lavadas”.

(Con información de AFP y AP)

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