El canciller de Putin evitó hablar en la ONU de los crímenes de guerra en Ucrania, defendió la invasión y denunció la supuesta “rusofobia de Occidente”

Sergei Lavrov se dirigió a la Asamblea General de las Naciones Unidas en un esperado discurso, en medio de la brutal invasión de su país a Ucrania.

Compartir
Compartir articulo
El ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov, se dirige a la 77ª sesión de la Asamblea General de las Naciones Unidas en la sede de la ONU en Nueva York, Estados Unidos, el 24 de septiembre de 2022. REUTERS/Eduardo Munoz
El ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov, se dirige a la 77ª sesión de la Asamblea General de las Naciones Unidas en la sede de la ONU en Nueva York, Estados Unidos, el 24 de septiembre de 2022. REUTERS/Eduardo Munoz

Durante su intervención, el canciller ruso Sergei Lavrov no habló de las fosas comunes halladas en Bucha y Kharkiv, ni del horror en Mariupol, sino que denunció una supuesta “rusofobia” orquestada por los EEUU.

“La rusofobia oficial en Occidente no tiene precedentes, su alcance es grotesco”, dijo Lavrov, quien acusó a Estados Unidos de tomarse “por un enviado de dios en la Tierra” aunque sin “ninguna obligación”, pero con el “único sagrado derecho de actuar con impunidad cuando y donde quiera”. “No se avergüenzan de decir que tratan de infligir una derrota militar a nuestro país pero también destruir y fracturar a Rusia”, agregó ante una Asamblea medio vacía.

Después de que los líderes occidentales aprovecharon la tribuna de la ONU para denunciar la invasión rusa de Ucrania, Lavrov arremetió hoy contra estos líderes y dijo que lo que quieren hacer es que el mundo entero se convierta en su “patio trasero”, como preconizaba la doctrina Monroe en el siglo XIX que declaró que América Latina estaba bajo su única esfera de influencia.

Tras acusar a Occidente de introducir “líneas divisivas” en todas partes, han optado por la “confrontación” y no “hay una tercera opción posible ni compromisos”, proclamándose como los “dueños del mundo” en el que o “estás con nosotros o contra nosotros”, zanjó.

También defendió los referendos realizados el viernes en algunas zonas de Ucrania ocupadas por Rusia asegurando que la gente reclama la tierra “donde sus ancestros han vivido durante cientos de años”.

El presidente estadounidense, Joe Biden, y otros líderes occidentales han reiterado repetidamente que nunca aceptarán los resultados del dichas consultas, al considerarlas como un intento de alterar las fronteras por la fuerza.

Aumento de pena para los desertores

Moscú endureció el sábado las penas por los delitos cometidos en tiempos de movilización militar, castigando la rendición voluntaria o la negativa a combatir con hasta diez años de prisión, al tiempo que sustituyó a su máximo responsable de logística tras una serie de reveses en su ofensiva en Ucrania.

Las nuevas enmiendas y el cambio en el Estado Mayor se produce en medio de una importante campaña de movilización militar en Rusia y en un contacto de dificultades logísticas para Moscú en el conflicto, en el que Kiev está recuperando cada vez más territorio.

“El general Dmitri Bulgakov fue relevado en sus funciones como viceministro de Defensa” y será sustituido por el coronel general Mikhail Mizintsev, de 60 años, informó el Ministerio de Defensa.

El anuncio también llegaba en el segundo día de celebración de referéndums en las regiones del este y el sur de Ucrania, controladas por el Kremlin, sobre su anexión a Rusia.

La movilización anunciada por Putin el miércoles será probablemente uno de sus primeros grandes retos logísticos, ya que los cientos de miles de reservistas convocados deberán ser equipados y entrenados antes de su despliegue.

Muchos hombres en edad militar se apresuran a abandonar el país, como muestran vuelos de salida llenos y la fuerte afluencia de rusos en los países fronterizos con Rusia, como Kazajistán, Mongolia o Georgia, donde 2.300 vehículos privados esperaban para ingresar este sábado, según dijeron las autoridades regionales rusas.

“Estábamos hablando con nuestros amigos y muchos están pensando en irse”, dijo Daria, de 22 años, después de huir de Rusia a Estambul junto con muchos de sus compatriotas. “No todos querían irse en febrero. La decisión (de movilización) del 21 de septiembre obligó a muchos a pensarlo de nuevo”, agregó.

Más de 700 personas fueron detenidas en las protestas del sábado contra la movilización, según el grupo de seguimiento independiente OVD-Info.

Otra ley, también firmada el sábado, facilita la ciudadanía rusa a los extranjeros que se alistan en el ejército ruso.

SEGUIR LEYENDO: