Escándalo en Eslovenia: una familia enterró a un desconocido porque el hospital confundió las identidades de sus pacientes

“Alguien enterró a su padre ayer y hoy se ha enterado de que estaba vivo, mientras que otra familia se ha dado cuenta hoy de que era su padre el que había muerto”, explicó el ministro de Sanidad Danijel Besic Loredan, que presentó su renuncia por el caso

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Una familia celebró un funeral y luego descubrió que estaba viva la persona que se suponía que estaba muerta (Foto de archivo/Mario Franco/Colprensa)
Una familia celebró un funeral y luego descubrió que estaba viva la persona que se suponía que estaba muerta (Foto de archivo/Mario Franco/Colprensa)

Una confusión de identidades en Eslovenia puso de luto a una familia que, tras el que creían era el funeral de su abuelo, descubrieron que habían enterrado a otro hombre de la residencia de ancianos donde vivía.

El caso llevó el jueves al ministro de Sanidad a ofrecer su dimisión, que fue rechazada por el primer ministro.

Los dos ancianos, ambos de la misma edad y confinados a una silla de ruedas, fueron trasladados al mismo hospital desde la misma residencia de ancianos, situada en la ciudad eslovena de Zidani Most.

“Alguien enterró a su padre ayer y hoy se ha enterado de que estaba vivo, mientras que otra familia se ha dado cuenta hoy de que era su padre el que había muerto”, declaró en rueda de prensa el ministro de Sanidad, Danijel Besic Loredan.

Los dos residentes, uno de ellos con demencia avanzada, fueron trasladados al hospital la semana pasada con diferentes problemas de salud.

Uno de ellos falleció dos días más tarde pero informaron a la familia equivocada.

Tras el control forense, la familia organizó una incineración y celebró un funeral el miércoles.

El error no se descubrió hasta que el segundo hombre se recuperó de su enfermedad y regresó a su residencia, donde el personal se dio cuenta de que llevaba la etiqueta de identidad equivocada en la muñeca.

“Es totalmente inaceptable”, dijo el ministro a los periodistas, cuya dimisión no fue aceptada por el primer ministro. En su lugar se ha ordenado una investigación sobre el caso.

Según el periódico en línea esloveno Žurnal24, la dirección del Hospital General de Celje renunció por este incidente.

Los dos hijos que se enteraron de que su padre fue incinerado por otra familia hablaron con el ministro Besic Loredan y, según Žurnal24, le dijeron: “Nuestro padre no se merecía esto”. Y el ministro de Sanidad les dio la razón públicamente: “Es cierto, nadie se merece esto”.

(Con información de AFP)

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