Más de 1.000 cadáveres de civiles asesinados abarrotan las morgues de Kiev tras la retirada rusa

El gobernador de la región de la capital ucraniana declaró que estas personas fueron “ejecutadas o torturadas hasta la muerte” por las fuerzas de Putin. Expertos forenses están examinando los cuerpos

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Una mujer reacciona durante el funeral de su pariente, que murió durante el bombardeo de las tropas rusas, en medio de la invasión rusa de Ucrania, en el cementerio de Irpin, región de Kiev, Ucrania (REUTERS/Gleb Garanich)
Una mujer reacciona durante el funeral de su pariente, que murió durante el bombardeo de las tropas rusas, en medio de la invasión rusa de Ucrania, en el cementerio de Irpin, región de Kiev, Ucrania (REUTERS/Gleb Garanich)

Más de 1.000 cuerpos de civiles están actualmente en las morgues de la región de Kiev, indicó a la AFP el jueves una responsable de Ucrania, cuyas autoridades acusan a los rusos de haber “masacrado” a centenares de personas durante la ocupación de la zona en marzo.

“1.020 cuerpos de civiles, únicamente civiles, están en las morgues de la región de Kiev”, declaró a la AFP la vice primera ministra ucraniana Olga Stefanishyna, en la ciudad de Borodyanka, al noroeste de la capital.

Desde la retirada de las tropas rusas de esta zona, centenares de cadáveres de civiles fueron recogidos por las autoridades ucranianas, que denuncian “crímenes de guerra”, lo que Moscú desmiente.

Los cuerpos que esperan ser identificados por sus familias se ven fuera de la morgue en medio de la invasión rusa de Ucrania, en Bucha, región de Kiev, Ucrania, 20 de abril de 2022. (REUTERS/Zohra Bensemra)
Los cuerpos que esperan ser identificados por sus familias se ven fuera de la morgue en medio de la invasión rusa de Ucrania, en Bucha, región de Kiev, Ucrania, 20 de abril de 2022. (REUTERS/Zohra Bensemra)

Stefanishyna precisó que esta cifra representaba el total de cuerpos de civiles “hallados en los edificios y también en las calles” de la región de Kiev desde el inicio de la invasión rusa, el 24 de febrero.

En Borodyanka, una ciudad a 54 km de la capital, la policía denunció el hallazgo de nueve cadáveres de civiles enterrados en dos fosas.

Poco antes, el gobernador de la región de Kiev, Alexander Pavliuk, declaró en una rueda de prensa que estos civiles fueron “asesinados o torturados hasta la muerte” por los rusos. Expertos forenses estaban examinando los cuerpos, añadió.

El 3 de abril, la fiscal general de Ucrania, Iryna Venediktova, informó que por el momento habían sido encontrados 410 cadáveres de civiles en la región de la capital ucraniana, retomada a las tropas rusas unos días antes. Una semana después, el 10 de abril, indicó que más 1.200 cuerpos habían sido hallados en la zona, sin detallar si se trataba únicamente de civiles.

El jueves acudieron a Borodyanka el presidente del gobierno español Pedro Sánchez y la primera ministra danesa Mette Frederiksen.

“Conmovido al comprobar en las calles de Borodyanka el horror y las atrocidades de la guerra de Putin”, escribió en Twitter el jefe de gobierno español, junto a una imagen de una parte en ruinas de la ciudad, que pudo visitar. “No dejaremos solo al pueblo ucraniano”, agregó.

Pedro Sánchez en Borodyanka, (Moncloa/Borja Puig de la Bellacasa/Handout via REUTERS)
Pedro Sánchez en Borodyanka, (Moncloa/Borja Puig de la Bellacasa/Handout via REUTERS)

Una guerra larga

En tanto, la batalla por el Donbás, la cuenca minera oriental donde Kiev combate con separatistas prorrusos desde 2014, y parte del sur del país se anuncia larga.

La toma de Mariúpol y el establecimiento de un corredor bajo control ruso hasta la península de Crimea puede permitir a Moscú reforzar sus posiciones en la línea más al norte, cerca de Kharkiv, la segunda ciudad ucraniana.

Al mismo tiempo, la resistencia ucraniana se anuncia feroz, especialmente con el aumento sustancial de la ayuda militar de Estados Unidos y de varios de sus aliados occidentales.

Algunos diplomáticos occidentales temen, sin embargo, que el alargamiento de la guerra debilite la unidad de acción en las medidas contra Rusia.

Si la guerra se concentra en el Donbás, lejos de Kiev y de las fronteras de la OTAN, el sentimiento de urgencia y unidad de Occidente puede a la larga disminuir. “Es un desafío”, dijo un diplomático a AFP.

(Con información de AFP)

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