Francia: un hombre quemó viva a su esposa después de perseguirla por la calle y dispararle en las piernas

Un hombre en Francia quemó viva a su esposa en medio de un horrible ataque que incluyó una persecución por la calle, disparos a las piernas de la mujer, rociarla con gasolina y prenderla fuego mientras aún seguía con vida.

El escabroso suceso ocurrió a plena luz del día del martes, según informó este miércoles la policía francesa, en el barrio de Marignac, un acomodado sector cercano al aeropuerto de Burdeos, en el suroeste de Francia.

La mujer asesinada tenía 31 años y era madre de tres hijos pequeños. Fue perseguida por la calle por su esposo, de 44, quien luego le disparó en las piernas antes de rociarla con un líquido inflamable y prenderle fuego.

“El hombre disparó varios tiros a la mujer mientras huía por una calle, golpeándola en las piernas. Después de que se derrumbó, él le prendió fuego”, dijo la policía.

Según el portal digital Actu17, el hombre ya había sido condenado en 2020 por violencia conyugal por el Tribunal Correccional de Burdeos a 18 meses de prisión, nueve de ellos exentos de cumplimiento.

En ese primer incidente la víctima todavía era su esposa, pero aunque se separaron después del juicio, al momento del segundo ataque mortal el hombre aún vivía en la casa. Allí también vivían sus tres hijos, de 3 años, 7 años y 11 años, que estaban en custodia de la madre asesinada.

El hombre fue arrestado media hora después del asesinato en el distrito vecino de Pessac, armado con una pistola, una pistola de perdigones y una cartuchera, dijo la fiscalía de Burdeos. Se sospecha tanto del asesinato de su esposa como de haber iniciado un incendio que dañó su casa, ubicada cerca del lugar.

Los hijos de la pareja no estaban en casa en el momento del ataque, dijo la oficina del fiscal, y agregó que estaban recibiendo acompañamiento psicológico sobre traumas.

El tema de la violencia doméstica y los asesinatos no es nuevo en Francia, por el contrario, en 2019 provocó una serie de protestas en todo el país. Los activistas se quejaron de que las mujeres que intentaban denunciar a las parejas abusivas a la policía a menudo eran rechazadas y revictimizadas por la fuerza pública. Ese año vio 146 mujeres asesinadas por su cónyuge o pareja, un aumento del 21 por ciento con respecto al año anterior.

Después de una protesta, el gobierno introdujo el uso de brazaletes electrónicos para alertar a las víctimas cuando sus atacantes están cerca. En 2020, el número de asesinatos se redujo a 90.

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