Tras ser investida simbólicamente como presidenta, la opositora bielorrusa Svetlana Tijanóvskaya le pidió a Macron oficiar como mediador con Lukashenko

La líder de la oposición bielorrusa Svetlana Tijanovskaya pidió este lunes al presidente francés Emmanuel Macron que sea “mediador” para resolver la crisis en la ex república soviética, un día después haber recibido la investidura simbólica como “nueva presidenta” de Bielorrusia por parte de miles de manifestantes en todo el país.

“Las protestas no van a detenerse”, dijo en una entrevista a la AFP en Vilna, Lituania, donde se encuentra exiliada tras las elecciones presidenciales bielorrusas del 9 de agosto, en las que enfrentó a Lukashenko, electo con el 80% de los votos según resultados oficiales cuestionados por la oposición.

La opositora bielorrusa dijo que espera reunirse con Emmanuel Macron durante la vista del mandatario francés a Lituania este lunes y martes.

“Macron es uno de los líderes más fuertes de Europa y el mundo (...) Podría ser mediador y ser capaz de influir en Putin, con quien tiene buenas relaciones”, dijo la opositora.

“Pedimos esta reunión pero aún no recibimos confirmación. Espero que podamos reunirnos, quizás mañana (martes)”, precisó.

Más tarde, el mandatario francés confirmó que se reunirá con Tijanovskaya este martes.

“Macron y Francia son conocidos por haber desempañado el papel de mediadores en muchos otros casos. Por supuesto preferiríamos resolver este problema nosotros mismos, pero vemos que las atrocidades continúan, que el pueblo bielorruso sufre y que nuestras autoridades no inician ningún diálogo”, reafirmó.

La reunión con Macron será la de más alto nivel para Tijanóvskaya desde las elecciones y las semanas de protestas que han seguido en Bielorrusia.

El domingo, en una entrevista en vísperas de su visita a Lituania, el presidente francés dijo que “Lukashenko debe partir” y saludó el coraje de los manifestantes bielorrusos, que el domingo volvieron a salir a las calles para denunciar al régimen.

Sanciones más duras

Esta novata en política, de 38 años, ama de casa y formada como profesora de inglés, ya se entrevistó con los líderes de Polonia y Lituania, dos países vecinos y miembros de la Unión Europea, así como con los ministros de Relaciones Exteriores de la UE.

“Ahora es el momento en que Bielorrusia necesita ayuda para iniciar un diálogo”, sostuvo en referencia a su pedido a Macron.

La UE considera sanciones personales contra Lukashenko y otros altos miembros del gobierno bielorruso, a los que considera responsables de la violenta represión contra los manifestantes, especialmente en las primeros noches de protestas tras las elecciones.

Pero Tijanóvskaya quiere que la UE vaya más lejos y adopte “sanciones económicas contras empresas y empresarios que apoyan el régimen de Lukashenko”.

En ese sentido, enfatizó que las sanciones no deben afectar la economía general de Bielorrusia porque “la gente común sufrirá más”.

Investidura popular

Decenas de miles de bielorrusos salieron el domingo a la calle en varias ciudades del país para “investir” simbólicamente a Tijanóvskaya" y exigir la renuncia de Alexandr Lukashenko, quien asumió esta semana su sexto mandato en una investidura no anunciada.

“Sveta es nuestra presidenta”, corearon unos 100.000 manifestantes en el centro de Minsk, en alusión a Tijanóvskaya, que se considera la dirigente legítima de Bielorrusia.

Hubo otras marchas solidarias en otras ciudades, como en Grodno, Brest, Gomel, Vítebsk, Bobruisk y Moguiliov, aunque menos numerosas

En Minsk, varios manifestantes llevaban caretas con el rostro de la opositora impreso y una corona en la cabeza, como símbolo de la “coronación” de Tijanóvskaya como “nueva presidenta” de Bielorrusia.

Y es que la oposición llamó a celebrar en un entorno festivo una simbólica “investidura del pueblo” de la líder de la oposición.

Lukashenko asumió el pasado miércoles en una ceremonia de investidura cuasi secreta su sexto mandato, al considerarse el ganador legítimo de las elecciones del pasado 9 de agosto, en el que la Comisión Electoral Central (CEC) le concedió el 80,1 % de los votos frente al 10 % que otorgó a Tijanvoskaya.

La líder de la oposición animó este domingo en su canal de Telegram antes del inicio de la marcha a los bielorrusos a seguir presionando a Lukashenko para que renuncie.

“Hoy es el quincuagésimo día de nuestra protesta y el pueblo bielorruso vuelve a tomar las calles. Salimos para frenar a este régimen y lo estamos haciendo pacíficamente”, escribió.

“La democracia es el pueblo. Y todo un pueblo es más fuerte que una persona, porque el pueblo está luchando por sus derechos, su futuro y el futuro de sus hijos. Somos millones y estamos dispuestos a asumir la responsabilidad de nuestras decisiones. Por eso ganaremos”, sostuvo Tijanóvskaya.

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