La razón por la que una localidad alemana instaló semáforos con la silueta de Elvis Presley

Para indicar a los viandantes que pueden cruzar la calle, un pequeño Elvis Presley de luces verdes se mueve al ritmo de su famoso movimiento de pelvis. En color rojo, micrófono en mano y completamente estático, la silueta del artista obliga a los ciudadanos a detenerse. Así son los originales semáforos que ha instalado en sus calles la ciudad de Friedberg, al oeste de Alemania.

Suman un total de tres, y han costado 900 euros al ayuntamiento de la localidad, unos 1025 dólares americanos. Los particulares semáforos se unen a la plaza ya existente que hace honor al artista de rock and roll, quien supone todo un orgullo para la historia de Friedberg.

Los lazos de Elvis Presley con esta pequeña comunidad se remontan al mes de octubre del año 1958. Entonces, el estadounidense viajó a Alemania para realizar el servicio militar. La base se situaba en una pequeña región de nombre Friedberg, situada a 26 kilómetros de la más conocida Fráncfort.

Allí permaneció durante algo más de dos años, hasta marzo de 1960. Desde ese momento, el artista se convirtió en una institución para la localidad, que aprovechó para convertirlo en todo un reclamo turístico.

Con el fin de atraer a los fans de Elvis, Friedberg impulsa distintas iniciativas, siendo la última estos originales semáforos. Sin embargo, no es la única localidad en suelo germano que puede presumir de haber sido destino y hogar de Elvis durante su estancia en Europa.

A siete kilómetros, la vecina Bad Nauheim le disputa los turistas, lanzando distintas actividades en honor al cantante. Ambas regiones están sumidas en una batalla campal: las dos cuentan con clubs de fans del rey del rock and roll, ofrecen tours, celebran eventos cada 16 de agosto para conmemorar la muerte del cantante, y llevan a cabo acciones que buscan llamar la atención del público internacional.

Aunque Elvis asistía a la base militar de Friedberg, residió durante su estancia en el país en Bad Nauheim. En 1959, conoció en esta localidad a la que se convertiría en su esposa, Priscilla Ann Beaulieu Wagner, también de nacionalidad estadounidense. Se casaron siete años después, en 1967, y juntos tuvieron una hija, Lisa Marie Presley.

Además de competir celebrando un festival anual de cine protagonizado por el cantante, Bad Nauheim está considerando esculpir una estatua de bronce en su honor. Y ante la noticia de los nuevos semáforos que está estrenando su vecina Freidberg, seguro no tardarán en anunciar cuál será su próxima estrategia para ganar turistas y mantener viva a la leyenda del rock and roll.

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