Joven apátrida perdió a su familia en las FARC, habitó en la selva y ahora vive legalmente en México

El Instituto Nacional de Migración le otorgó la Tarjeta de Residente Permanente para tener derecho a trabajar de manera legal en el país

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Sebastián perdió a su padre y a su madre en 1992 durante la guerrilla colombiana. (Foto: INM)
Sebastián perdió a su padre y a su madre en 1992 durante la guerrilla colombiana. (Foto: INM)

Un joven nacido en Colombia, de nombre Sebastián, obtuvo en el estado de Durango su Tarjeta de Residente Permanente (TRP), con la que el Instituto Nacional de Migración (INM) reconoció su estatus de apátrida —es decir, que no tiene ninguna nacionalidad y, por ende, no tenía acceso a derechos ni protección legal—.

Nació en el año 1990, en plena guerrilla colombiana, cuando Pedro Antonio Marín aún era líder de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). Su padre y su madre formaban parte de esta organización insurgente hasta que fueron fusilados en 1992.

El joven que hoy tiene 32 años quedó bajo la tutela de una compañera de lucha. A los 10 años ya se había integrado al grupo que estaba al cuidado de la resistencia infantil. A los 15 comenzó a cumplir con tareas de recolección de víveres mientras vivía en la selva del Amazonas, en los territorios de Colombia, Brasil y Perú.

Una de las razones que lo llevó a abandonar su pueblo natal fueron las amenazas tras su resistencia a formar parte de grupos criminales.
Sebastián tenía el plan de viajar en Estados Unidos, pero se quedó en el estado de Durango. (Foto: INM)
Sebastián tenía el plan de viajar en Estados Unidos, pero se quedó en el estado de Durango. (Foto: INM)

Cuando comenzó la persecución de los guerrilleros en 2007, Sebastián se refugió en distintas comunidades a lo largo del país. Luego, en 2014, decidió ir a Estados Unidos junto con otros compañeros de las FARC.

Llegó a la Ciudad de México en diciembre de 2015 y comenzó a trabajar en una tienda de decoración en el mercado de La Merced y en Tepito. Siguiendo con su plan de ir al país hoy gobernado por Joe Biden, el joven migrante tomó un camión que lo llevó a la capital del estado de Durango.

En dicho estado trabajó como limpiabotas, obtuvo un empleo en un lavado de autos e incursionó en la jardinería. Además, tomó varios cursos de mecánica automotriz, lo que lo llevó a integrarse a un centro de servicio para automóviles. Finalmente, comenzó a laborar en un bar.

Pasó el tiempo y, gracias a la experiencia y el aprendizaje que adquirió, llegó a ser el encargado de la barra. Posteriormente se convirtió en el gerente de otro local.

Fue en enero de 2020 que conformó una familia y, debido a la necesidad de brindarle una mejor calidad de vida a su hijo, inició los trámites en la Oficina de Representación del INM en Durango para que se le reconociera su estatus de apátrida.

Hoy día resulta prácticamente imposible establecer una cifra exacta de personas apátridas en México y en todo el mundo, pero se estima que en nuestro país hay 13 casos. (Foto: REUTERS/José Luis González)
Hoy día resulta prácticamente imposible establecer una cifra exacta de personas apátridas en México y en todo el mundo, pero se estima que en nuestro país hay 13 casos. (Foto: REUTERS/José Luis González)

Con esto, Sebastián lograría tener acceso a los derechos de un ciudadano, así como la posibilidad de trabajar bajo los ordenamientos de la legislación mexicana y, de este modo, brindarle mejores condiciones de vida a su familia.

El Instituto se puso en contacto con las autoridades de Colombia con la finalidad de verificar la historia del joven, quien no contaba con un acta de nacimiento. Después de corroborar la información, se le entregó la Tarjeta de Residente Permanente, con la que pudo tener el reconocimiento de apátrida del Registro Civil, así como la posibilidad de registrar a su hijo con su apellido.

Cuántas personas apátridas hay en México

Debido a las condiciones que generan la apatridia, es muy difícil tener un conteo tanto a nivel nacional como a nivel global. Las estimaciones más recientes del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) señalan que en México se registraron 13 personas apátridas en 2021, cifra que se mantiene igual desde el año 2016.

México se adhirió en junio del año 2000 a la Convención sobre el Estatuto de los Apátridas, la cual se estableció desde 1954. Para el año 2011, según información en el portal del Consejo Nacional Para Prevenir la Discriminación (Conapred), había en México 20 casos de apatridia.

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