“Están anclados al antiguo régimen”: Mario Delgado pidió la renovación del TEPJF

El líder del Movimiento Regeneración Nacional (Morena), Mario Delgado Carrillo, indicó el pasado 6 de agosto que urge renovar el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) debido a la crisis que atraviesa.

“Sabemos qué las autoridades electorales en México están echadas a perder; han decidido tomar partido, actuando como actores políticos y no como árbitros, con protagonismo y con parcialidad; no se han comportado acorde a el momento histórico que vive México. Se requieren Magistrados y Consejeros electorales honestos y comprometidos con la democracia y la transparencia”, ahondó el morenista, tras destacar que el Congreso de la Unión debería tomar medidas lo más pronto posible.

También ahondó que el país requiere de mecanismos democráticos para garantizar la resolución de los asuntos pendientes de la reciente justa electoral llevada a cabo el 6 de junio de 2021.

“El pueblo de México nos ha demostrado una y otra vez que quiere vivir en una auténtica democracia, entonces, necesitamos autoridades comprometidas con impulsar la vida democrática en el país”, añadió Mario Delgado.

Asimismo, rescató que las irregularidades en los institutos electorales aún persisten y que Morena está enfocado en denunciar puntualmente todo aquello que esté fuera de la normativa.

El partidario de Morena indicó que el Instituto Nacional Electoral (INE) y el TEPJF “responden a intereses del pasado, porque están anclados al antiguo régimen”.

En este sentido, destacó que parte de la Cuarta Transformación abarca la regeneración de la vida pública del país” y una auténtica democracia.

Los conflictos entre los organismos electorales y el actual gobierno han sido muy marcados. Sin embargo, desde el 28 de abril, fecha en que por mayoría de votos la Sala Superior del TEPJF confirmó el retiro de las candidaturas de Morena para gobernador en Guerrero y Michoacán, las fricciones sólo han parecido ir en aumento.

Para Andrés Manuel López Obrador, la cancelación de ambas candidaturas fue “un atentado contra la democracia”. Días después, aseguró que se trataba de un “exceso, y un acto de provocación” e incluso aseguró no tenerle confianza al INE.

También en abril y con el periodo de elecciones más cerca, la Comisión de Quejas y Denuncias del INE apercibió al presidente por la difusión hecha en la conferencia mañanera del 16 de abril, de difundir logros de gobierno cuando estaba prohibido hacerlo.

Al final, el Instituto determinó que durante 29 mañaneras, el mandatario hizo propaganda gubernamental, lo que pudo influir en las preferencias del electorado. Las advertencias del INE enfurecieron al inquilino de Palacio Nacional quien lanzó diversos reclamos, aunque por ley, tuvo que retirar de sus redes sociales las conferencias señaladas.

El 29 de abril, López Obrador escaló sus críticas y desde su conferencia mañanera, planteó la desaparición del INE y añadió que esas funciones deberían ser llevadas a cabo por el Poder Judicial.

“Tiene que ser autónomo verdaderamente, es que ahora no lo es, y podría estar en el Poder Judicial, un Poder autónomo, independiente, con gente íntegra, honesta, intachable, pero no lo que estamos ahora padeciendo”, indicó.

Así, la más reciente disputa se dio con la consulta popular del pasado domingo 1 de agosto, donde la participación alcanzó los 6,6 millones de votos que representan el 7.11% de la Lista Nominal de Electores, por lo que no se alcanzó el 40% necesario para que el ejercicio fuera vinculante.

Tras los resultados, López Obrador atacó al INE al asegurar que no estaba a la altura de las circunstancias.

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