Cómo se están beneficiando los cárteles de la droga con el coronavirus

Grupos criminales en toda Latinoamérica han aprovechado la crisis para ejercer influencia en sus territorios

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No hay motivos para celebrar el 2020: miles de mexicanos han muerto por COVID-19, la economía está fracturada y el futuro ofrece un panorama poco prometedor. Sin embargo, también han habido ganadores en medio la actual crisis: ciertas compañías tecnológicas, proveedores médicos, pero, sobre todo, los cárteles del narcotráfico.

Grupos criminales en toda Latinoamérica han aprovechado la crisis para ejercer influencia en sus territorios. Entregan ayudas y hacen cumplir los toques de queda, incluso cuando disputan el territorio con otras bandas rivales.

Si bien las restricciones impuestas por la pandemia han reducido el movimiento de ciertas drogas, la demanda ha aumentado para otras. El Servicio de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos ha atrapado significativamente menos cocaína. Pero las incautaciones de heroína y fentanilo -un opioide sintético- se han mantenido estables, mientras que las incautaciones de metanfetamina han aumentado, lo que coincide con un aumento en las muertes por sobredosis en varias ciudades de EEUU.

Los profesionales de la salud dicen que el estrés, la soledad y las dificultades económicas exacerban el abuso de drogas.

(AP)
(AP)

Los estadounidenses gastaron aproximadamente USD 150 mil millones en drogas ilegales en 2016, y un río de armas fluye a México desde los Estados Unidos desde hace tiempo. Entre 2007 y 2018, más de 150,000 armas de fuego fueron confiscadas a delincuentes mexicanos; todas estaban fabricadas en EEUU.

Los mismos criminales que dejan un rastro de fosas comunes y desapariciones, buscan venderse como padrinos “benévolos”. Una de las constantes durante la crisis sanitaria en México por la epidemia de COVID-19 son videos que circulan en redes sociales en los cuales se aprecia a grupos armados identificados con los distintos cárteles de la droga entregando despensas en distintos estados.

Para cárteles como el de Sinaloa, el implementar este “escudo social” significa mantener su base de apoyo en los distintos poblados y ciudades del país y al mismo tiempo, aprovechan para hacer propaganda de sus organizaciones criminales.

Las ayudas de los cárteles fueron impulsadas a través de las redes sociales y se volvieron noticia en todo el mundo. Sin embargo, en realidad estas ayudas llegaron a muy pocos mexicanos. “Es simbólico”, dijo Lorenzo Meyer, un politólogo, al NYTimes. “Se están aprovechando de la crisis del coronavirus para decir: ‘Estamos aquí”.

Foto: Presidencia de México.
Foto: Presidencia de México.

El presidente López Obrador, de ideología izquierdista, ha prometido ayudar a los pobres con programas sociales generosos, entregando fertilizantes a los agricultores y becas a los estudiantes. En abril, criticó a los carteles por dar con una mano y matar con la otra. “Sería útil si pensaran en el sufrimiento de las madres de las víctimas”, refirió.

Pero la ayuda oficial se ha visto obstaculizada por una política que busca evitar la deuda ante la severa recesión que se avecina. Mientras el gobierno lucha por proporcionar ayuda en todo el país, los carteles se centran en pequeñas comunidades. Allí compran apoyo y lealtad para que luego puedan usarla en su beneficio y esconder mercancías o reclutar contrabandistas y asesinos.

En otro movimiento que llamó la atención, los narcotraficantes impusieron la cuarentena en algunas áreas. En la ciudad de Iguala, Guerrero, colgaban mensajes que decían: “Quédese dentro de sus hogares. No queremos desmadres afuera“.

Los carteles gobiernan en un ambiente de impunidad generalizada. Un estudio encontró que nueve de cada 10 asesinatos en México nunca se resuelven, e incluso en los casos de masacre de más alto perfil, la justicia es evasiva. Pero se ha convertido en un desafío central para López Obrador, especialmente en medio de la pandemia y la recesión, lo que complica su promesa de “regeneración nacional”.

México y Estados Unidos necesitan encontrar una manera de reducir el poder de los cárteles mediante la rehabilitación, la ayuda y la justicia.

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