Sangre, gatos demoníacos, tatuajes y rituales de destrucción: viaje al interior del Templo Satánico de Los Ángeles

El Templo Satánico de Los Ángeles, parte de la organización satánica nacional, organizó un encuentro masivo el sábado pasado por la noche. La reunión contó con un ritual de sangrado en vivo y una conferencia de 45 minutos sobre gatos demoníacos.

Los invitados también pudieron asistir a un ritual de destrucción y un ritual de invocación, ambos con música en vivo.

El evento recaudó fondos para las causas de la organización: derechos reproductivos de las mujeres y los derechos de los prisioneros.

El Templo Satánico, con sede en Salem, Massachusetts, tiene 24 "templos" en los Estados Unidos. Los miembros del movimiento, que se autodenomina una religión organizada, no creen en un Satanás personal, sino que dicen que predican el racionalismo y rechazan la superstición.

Las puertas abrieron a las 9 pm y la noche comenzó con una presentación del político satanita Steve Hill, quien se candidateó para el Senado estatal en el distrito 21 de California el año pasado.

"Soy un satanista en cuanto a tratar de hacer que la gente entienda que yo no creo en el diablo más de lo que creo en Dios", dijo Hill.

A las 10 pm comenzó una conferencia de 45 minutos sobre gatos demoníacos dictada por el escritor, fotógrafo y experto en fenómenos ocultos Paul Koudounaris, quien también ha investigado encuentros sexuales entre los vivos y los muertos.

La noche continuó con un ritual de destrucción que duró 50 minutos. Varios miembros más tarde pidieron el texto del ritual, que fue elogiado por un asistente como una "experiencia intensa e inspiradora".

Más tarde, la multitud participó en un ritual de sangría de 2:15 am a 2:45 am.

"Celebraremos la liberación, la rebelión y una nueva alianza satánica global", se promocionaba en el anuncio.

Los fondos recaudados durante la misa negra se destinarán a la campaña del grupo por los derechos reproductivos de las mujeres, algunas demandas relacionadas con asuntos de la Primera Enmienda, y se destinarán a ayudar a los individuos encarcelados.

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