“No puedo creer chismes de este nivel”, Yordi Rosado puso fin a los rumores sobre Kuno Becker

El conductor expresó que nunca revelará quién fue hace meses sus invitado incómodo y que por respeto, jamás lo hará

Compartir
Compartir articulo
Foto: Captura/@yordirosadooficial
Foto: Captura/@yordirosadooficial

El conductor Yordi Rosado aseguró este miércoles que no fue el actor Kuno Becker el famoso que llegó en estado inconveniente a su casa para una de sus entrevistas en su programa. De acuerdo con el también productor, se encuentra sorprendido de que estos “chismes” sigan circulando a más de un mes de especulaciones sobre su invitado “incómodo”.

Aunque Rosado jamás explicó quién fue la estrella que lo puso en una tensa situación, pues en una entrevista con Carlos Alazraki dijo que hubo un invitado que “llegó tan drogado que no podía ni hablar”, las especulaciones han corrido en redes sociales y en revistas de espectáculos.

Por el momento, ha salido a explicar que ni el protagonista de Fuego Ardiente, ni Fernando Carrillo fueron los que le causaron problemas, y hasta dice arrepentirse de dar esa declaración que ya le ha traído consecuencias.

“Me siguen preguntado que si entrevisté a Kuno Becker en estado inconveniente, claro que no. Al contrario, a Kuno lo quiero entrevistar, él nunca ha ido a mi departamento, no puedo creer que se inventen chismes de este nivel”, dijo en uno de sus estados más recientes de Instagram.

Foto: Captura/@yordirosadooficial
Foto: Captura/@yordirosadooficial

Rosado precisó que recientemente se encuentra en pláticas con el famosos de 43 años y que él pronto saldrá en una de sus emisiones de su programa. Por otro lado, adelantó que sin importar presiones, jamás dirá quién fue el enigmático entrevistado al que calificó como su peor invitado.

El productor aprovechó el momento para aplaudir la carrera del actor de telenovelas, sin embargo, Becker fue acusado de prepotente dentro de la producción de la telenovela Fuego Ardiente

“Ya tenemos una fecha para entrevistarlo, Kuno de muy buena fuente sé que llega muy temprano, incluso hace unos papelazos. En algún momento tuve el error de decir hay alguien que entrevisté en ese estado (drogado), no fue Kuno, no fue Fernando (Carrillo), y no lo diré. No lo haré porque es una persona que me con confío su tiempo”, detalló el conductor en sus historias.

Por otro lado, la revista TVNotas publicó que una persona cercana Kuno confirmó que fue el “invitado incómodo” pues asegura que, así como se puso con Yordi, también ha estado recientemente en las grabaciones de la novela Fuego Ardiente e incluso ha llegado al grado de casi agarrarse a golpes con Carlos Ferro, protagonista de la novela y con quien antes se llevaba muy bien.

En tanto, el actor Fernando Carrillo reaccionó en marzo para comprobar si fue él quien llegó “drogadísimo” y “alucinando” como asegura el conductor sobre su experiencia con alguien desconocido para las audiencias. El actor ofreció 50 mil pesos si de la boca de Rosado salía que fuese él quien llegó en mal estado a la hora de la exclusiva.

infobae

“Jamás escuché al buen Yordi Rosado decir algo así de mí. ¿O sí ,Yordi? Alguien que me muestre a Yordi diciendo esto y le doy 50 mil pesos. Quiero verlo y escucharlo de boca de Yordi. ¿O será una persona doble cara? Así se despidió de mí en WhatsApp”, escribió el actor en su cuenta de Twitter hace dos meses.

Agregó una captura de pantalla en la que se muestra una conversación de a través de mensajería instantánea. En ella solo había mensajes de despedida y del trato cordial que sostuvieron en su encuentro.

Según Rosado “la entrevista fue una experiencia muy rara”, pues, en el programa de Carlos Alazraki confirmó que las declaraciones de su “entrevistado”, las cuales se llevaron a cabo cerca de las playas de Tulum, fueron inusuales e incluso tuvo que pedirle a su staff que los escondieran de su incómodo invitado. El conductor incluso bromeó y dijo que no se trataba del actor Roberto Palazuelos, como es especuló en un inicio.

Según los detalles que ha ofrecido Rosado de esa entrevista, fueron cuatro horas de hablar con el aún anónimo que además, no quería salir de su casa. “Por piedad me tuve que ir a meter a mi vestidor, marcarle a Manolo Fernández, mi productor, y decirle ‘sáquenlo, ya no quiero oír”.

SEGUIR LEYENDO: