Una madre demandó a la ciudad de Arizona porque los médicos le diagnosticaron mal la enfermedad a su hija

Murió en mayo del año pasado supuestamente por no recibir el tratamiento médico adecuado

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(Foto: ice.gov)
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Una madre guatemalteca interpuso hoy una demanda a la ciudad de Eloy, en Arizona, debido a que su hija, menor de edad, murió en mayo del año pasado supuestamente por no recibir el tratamiento médico adecuado en un centro de detención para inmigrantes.

En la demanda, Yazmin Juárez argumenta que su hija Mariee, de un año de edad, desarrolló una enfermedad respiratoria en The South Texas Family Residential Center, ubicado en Dilley, Texas, y que el personal médico no la atendió debidamente antes de dejarla en libertad.

La demanda, sin embargo, se dirige a la ciudad de Eloy (Arizona) que recibió fondos por parte de la Oficina de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) para administrar oficialmente las instalaciones de Texas durante cuatro años.

Eloy pagó a su vez al operador de la prisión privada CoreCivic para operar en Dilley, mediante un acuerdo cuestionado por los propios abogados del ICE.

(Foto: AP)
(Foto: AP)

En la demanda se especifica que Mariee desarrolló una fiebre severa una semana después de ingresar a Dilley, el 5 de marzo de 2018.

De acuerdo con el documento legal, su madre pidió repetidamente tratamiento médico, pero el personal médico diagnosticó mal la enfermedad de la menor y no se le recetó el medicamento correcto.

Madre e hija fueron liberadas el 25 de marzo y se dirigieron a Nueva Jersey, donde, junto con unos familiares, Juárez buscó ayuda médica.

Mariee fue hospitalizada por insuficiencia respiratoria durante seis semanas y murió en el Hospital de Niños de Filadelfia, el 10 de mayo, de acuerdo con los abogados de Juárez.

Decenas de niños se encontraban entre el grupo de inmigrantes (Foto: Twitter, CBP Arizona)
Decenas de niños se encontraban entre el grupo de inmigrantes (Foto: Twitter, CBP Arizona)

La muerte de Mariee revive la queja de organizaciones proinmigrantes, que han denunciado varias veces la precaria atención médica que reciben los migrantes en los centros de detención.

El 8 de diciembre pasado, la niña guatemalteca Jakelin Caal, de siete años de edad, falleció en el hospital de El Paso, Texas, por deshidratación severa, después de haber sido detenida junto con su padre tras cruzar ilegalmente la frontera desde México.

Otro niño migrante guatemalteco, Felipe Gómez Alonzo, de ocho años de edad, falleció ese mismo mes, en Nochebuena, bajo la custodia de la Patrulla Fronteriza estadounidense.

(Con información de EFE-USA)