Nahuel Guzmán siempre ha sido un personaje polémico en el fútbol mexicano por su personalidad extrovertida. No le pesa hablar antes de tiempo y mucho menos reclamar cuando la situación lo amerita.
Eso sucedió en el la final del Mundial de Clubes un mes atrás, cuando los Tigres cayeron 1-0 frente al Bayern Múnich en el partido más importante de su historia. Aquel día, el “cuadro bávaro” consiguió su anhelado “sextete” gracias a un polémico gol de Benjamín Pavard por un rebote previo en la mano de Robert Lewandowski.
Cuando finalizó el partido, lo primero que pasó en la mente del “Patón” Guzmán fue reclamarle al delantero polaco por la infracción, por lo que a la mitad de la premiación, se inmiscuyó entre los jugadores del Bayern y con un inglés pobre, le señaló que el balón había tocado en su mano.
De esto platicó para el medio de La Nación, en Argentina, donde contó la anécdota de cómo fue que tomó la decisión de ir a reclamarle al final del partido y cómo pasó por encima del Manuel Neuer para lograrlo .
“Yo estaba con bronca, tenía la sensación de que el gol de ellos había sido con la mano. El chico de los videos que trabaja en el club se me acerca y en el celular me muestra la cámara de atrás de arco y me dice ‘fue mano’. No me podía quedar con eso. Neuer me miró pensando que lo iba a saludar a él. Llego a Lewandowski y le tiro mis dos clases de inglés ‘Congrat’, le dije y agrego: ‘Touch in your hand’, así, a lo indio. Y me responde: ‘¿In my hand?’ No, no’. Entonces le meto: ‘Bueno, dale, ya está, en la repe se está viendo que sí'. Claro, de todo eso no me entendió nada”.
Las represalias las vivió después en los vestidores cuando mandaron a cambiar las camisetas, o ‘buzos’, como menciona Nahuel, pues debido a la celebración del cuadro bávaro y por protocolo, estas no pudieron intercambiarse sobre la cancha.
“No sé si Lewandowski se lo habrá comentado a Neuer, porque ya en los vestuarios mandamos a cambiar muchas camisetas… y mi buzo volvió. Me dijo que no. Mandó a decir que no cambiaba sus buzos, no sé…”
Al final Nahuel regresó a México sin el jersey de uno de los mejores porteros de la historia reciente, campeón del mundo en 2014, dos veces campeón de Champions League y multicampeón de la Bundesliga, aunque en palabras del guardameta argentino, él no tiene nada que envidiarle a Manuel Neuer.
“Dejé de seguirlo en Instagram. Pero bueno, no me pierdo nada. No tengo nada que envidiarle”, sentenció el argentino.
En la entrevista realizada por Cristian Grosso, el arquero de 35 años se abrió para contar la parte escondida de su persona. Desde las creencias políticas y la homofobia, hasta las anécdotas de Rusia 2018 y su relación con Messi.
Entre las historias relatadas, Nahuel Guzmán valoró lo que ha significado México en su vida personal más allá de lo futbolístico, pues en tierras aztecas nació su primogénito Agustín y construyó una familia, pero ahí mismo también sufrió la pérdida de su padre.
El “Patón” está agradecido por cómo se dio su carrera en los Tigres de la UANL, donde se ganó su regreso a la Selección Argentina y le permitió disputar un Mundial de Clubes, donde más allá de las camisetas que nunca llegaron, se va fue una historia más por contar.
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