El formato escogido por el Inter ya se vio en otras ocasiones pero no había tenido el nivel de efectividad con el que contó en el duelo ante Barcelona. El equipo italiano caía 1-0 en el Camp Nou y gracias al método utilizado en un tiro libre la ventaja en ese momento no fue mayor.
Luis Suárez se hizo cargo de una pelota parada en la puerta del área italiana cuando faltaban 25 minutos para el final del partido por la tercera fecha de la fase de grupos de la Champions League.
El uruguayo apostó a que la barrera saltaría, pero no contó con la irrupción repentina del mediocampista Marcelo Brozovic, quien se tiró al piso a toda velocidad y consiguió que el disparo rasante del goleador impactara en su cuerpo.
Más allá de esta acertada interrupción de Brozovic, el arquero Samir Handanovic sostuvo a su equipo en partido hasta los 81 minutos cuando no pudo evitar un potente remate cruzado de Jordi Alba al 2-0.
Hace algunas semanas el PSV apostó por una táctica similar en un tiro libre de Messi, pero no pudo impedir el gran gol del argentino que en esta jornada siguió el partido desde la tribuna por la lesión en el brazo.
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