Las críticas del Banco de la República al aumento del salario mínimo en Colombia

El incremento del 10%, detallan los expertos, dificultará el control de la inflación, y contribuiría en ‘desanclar’ las expectativas de la misma

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(Colprensa - Juan Páez)
(Colprensa - Juan Páez)

El pasado miércoles 15 de diciembre, el presidente colombiano, Ivan Duque, firmó el decreto que estableció un aumento del 10,07% al salario mínimo que recibirán los trabajadores durante el 2022. El jefe de Estado aseguró que aquel incremento era histórico, sin embargo, especialistas financieros y personalidades del panorama político nacional criticaron la decisión. Para los codirectores del Banco de la República el aumento está muy por encima de lo usual. Esto se dio en medio de la última sesión de la Junta Directiva del Banco de la República de la última sesión de la Junta Directiva del Banco de la República en la que, además, incrementó su tasa de interés al 3%.

“Quiero decir con alegría que se hace historia en nuestro país. Se hace historia porque se llega a un salario mínimo de un millón de pesos, cumpliendo una promesa de campaña, un anhelo de los trabajadores por décadas y, también, con una agenda de solidaridad y de generosidad que quiero reconocerles a empresarios, emprendedores e industriales”, manifestó Duque.

Fue el pasado 17 de diciembre cuando se desarrolló aquella sesión. Allí, la Junta incrementó la tasa de interés de política en 50 puntos básicos, una decisión que se dio luego de una votación que terminó cuatro a tres. Esta determinación se dio bajo la perspectiva de lo ocurrido en noviembre pasado. La inflación anual, para ese mes, tuvo un crecimiento de 68 puntos básicos. En octubre, fue del 5,26%, de acuerdo con lo que explicó el diario económico La República.

Fotografía cedida este miércoles por la Presidencia de Colombia en la que se registró al mandatario Iván Duque (i) mientras posa con el decreto que fija el nuevo salario mínimo para los trabajadores, en Bogotá (Colombia). EFE/Presidencia de Colombia
Fotografía cedida este miércoles por la Presidencia de Colombia en la que se registró al mandatario Iván Duque (i) mientras posa con el decreto que fija el nuevo salario mínimo para los trabajadores, en Bogotá (Colombia). EFE/Presidencia de Colombia

“La inflación básica anual (IPC sin alimentos ni regulados) también mostró una tendencia creciente al situarse en 2,54%, 52 p.b. por encima del nivel de octubre. Estos resultados llevaron a una revisión del pronóstico de inflación a 5,3% para 2021 y a 3,7% para 2022″, agregó la entidad.

El incremento, argumentó la Junta, se posicionó por encima de lo que tenía presupuestado el equipo técnico. La inflación básica anual, de hecho, sin contar alimentos ni regulados, creció 52 puntos básicos en comparación a lo ocurrido durante el pasado mes de octubre. Teniendo en cuenta el análisis, el pronóstico de inflación para el 2022 se estableció en 3,7%. Es aquí cuando entra a discusión el tema del salario mínimo. Según el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), más de 10 millones de colombianos gana solo un salario mínimo e incluso menos.

“Esto, unido a la notoria aceleración de los distintos indicadores de inflación observada y esperada desde la sesión anterior de la Junta Directiva hace que para este grupo sea conveniente acelerar el ritmo de ajuste de la política monetaria”, apuntó la entidad en una comunicación.

Los expertos aseguran que el aumento del salario mínimo está ‘muy por encima’ de la práctica usual. Si se trae a colación lo concluido por la junta, un aumento podría hacer más exigente la tarea del Banco de la República en el control de la inflación. En otras palabras, un aumento del 10%, detallan los expertos, dificultaría el control de la inflación, y contribuiría en ‘desanclar’ las expectativas de la misma.

“Genera un reto particularmente fuerte para el mandato constitucional del Banco de la República, de mantener una inflación baja y estable, que ahora se vuelve especialmente importante para garantizar que el aumento de los salarios nominales no se vea diluido por un incremento en los precios, y que se convierta en un verdadero aumento en el poder adquisitivo de los trabajadores colombianos (...) Las expectativas de inflación han aumentado y se ubican por encima de la meta de 3%, incluso a mediano plazo. Ello implica el riesgo de inducir procesos de indexación a mayores niveles de inflación”, detalló Leonardo Villar, gerente general del emisor.

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