Disidencia de ‘Iván Márquez’, ‘Santrich’ y compañía rompe su silencio sobre el asesinato de Álvaro Gómez Hurtado

En la tarde de este lunes festivo, las disidencias de las FARC, comandadas por alias ‘Iván Márquez’ y ‘Jesús Santrich’ emitieron un comunicado en el que aceptan el crimen de Álvaro Gómez Hurtado. Frente a las dudas que recaían sobre si la confesión del partido FARC se trataba de un encubrimiento, los guerrilleros de nuevo armados aseguraron que la orden de acabar con la vida de Gómez Hurtado se dio desde 1982.

En la carta, que publicó la unidad investigativa del diario El Tiempo, aseguran que “ninguna de las hipótesis sobre los móviles y autores de la muerte de Álvaro Gómez Hurtado eran ciertas, y ninguno de los que de una u otra manera habían sido implicados tenían que ver con tal suceso”.

Sobre los acusados que históricamente ha tenido el caso, desmintieron la participación de Éver Veloza, alias HH, exjefe paramilitar en Urabá; Santa Lopesierra y Luis Hernándo Gómez, alias 'Rasguño’. También cuestionaron que se haya incriminado de manera “premeditada” al expresidente Ernesto Samper.

Los disidentes se mostraron críticos frente al hecho de que la Fiscalía declaró como crimen de lesa humanidad el asesinato de Gómez Hurtado, pues señalan que la decisión de eliminarlo tuvo que ver con una responsabilidad más bien histórica del político con los hechos que sucedieron en Marquetalia, cuando nació la guerrilla rebelde de las FARC. Alegan que no se ha hecho una investigación similar sobre lo que "cometió el régimen contra los campesinos de Marquetalia, de su pertinaz y tenebrosa persecución, de sus muertes y lutos, como de la confrontación fratricida que se desató y aún no culmina”.

Finalmente, confirman que la decisión del magnicidio se tomó en la famosa Séptima Conferencia del Meta, entre mayo 4 y 14 de 1982. Este es el tercer comunicado que se atribuyen las llamadas disidencias ‘Segunda Marquetalia’, integradas además por alias 'El Paisa’ y alias ‘Romaña’.

La anterior confesión de FARC

El pasado 3 de octubre, el partido político Farc envió una carta a la Jurisdicción Especial para la Paz -JEP-, firmada por Julián Gallo Cubillos, Pastor Lisandro Alape Lascarro y Pablo Catatumbo Torres Victoria, y sus abogados, en la que se atribuyen el asesinato del político conservador Álvaro Gómez Hurtado, ocurrido el 2 de noviembre de 1995.

La confesión del crimen por parte de lo exjefes guerrilleros generó una ola de comentarios por parte de políticos, algunos incluso apuntaron a un supuesto encubrimiento de los verdaderos responsables del crimen.

“Los ojos bien abiertos: si JEP asume competencia en caso de Álvaro Gómez será para encubrir a los verdaderos responsables. Farc estarán dispuestos a hacerles el favor a sus amiguetes. No es coincidencia. Precisamente ahora empiezan a verse avances”, escribió en su cuenta de Twitter Rafael Nieto Loaiza, miembro del Centro Democrático.

Senadores del partido de gobierno también se unieron para rechazar que las Farc se haya atribuido el asesinato de Gómez Hurtado.

Incluso el presidente Iván Duque reaccionó frente a la noticia: “Vimos en las últimas horas que algunos miembros de las Farc se han atribuido ese hecho y que van a decirle eso a la JEP. Yo quiero decir lo siguiente, obviamente que la justicia cumpla con su tarea, pero también que no vaya a permitir que por una vea se trate de obstruir la verdadera responsabilidad que hay detrás de ese asesinato”.

El mandatario dijo que le generaba dudas que las Farc se adjudiquen el crimen, “cuando ya hay garantías de que nadie va a pagar cárcel. No deja de generar dudas, sospechas, preocupaciones”.

Además, señaló que si alguien se atribuye esta muerte y no corresponde a la verdad se debe entender “que se está cometiendo un delito para obstruir la justicia en nuestro país. Queremos que la justicia actúe con contundencia con prontitud y que no desestime ninguna de las consideraciones, ni en las afirmaciones que, también, ha hecho la familia de Álvaro Gómez sobre lo que ellos reclaman debe ser investigado para que se sepa la verdad”.

“Fue un error haber matado al político”

Rodrigo Londoño, jefe político de las Farc, publicó una declaración en la que admiten que estuvieron detrás del asesinato de Gómez Hurtado en 1995.

“Hemos manifestado nuestra decisión de aportar verdad y reconocer la responsabilidad de las Farc en los homicidios de Álvaro Gómez Hurtado, Jesús Antonio Bejarano, Fernando Landazábal Reyes y Pablo Emilio Guarin, así como de Hernando Pizarro y José Fedor Rey. Ratificamos nuestro compromiso indeclinable con la paz de Colombia, con las víctimas y sus familiares”.

El partido Farc señala que durante 25 años este crimen, declarado como de lesa humanidad en mayo de 2019, ha permanecido en una impunidad.

“Eso lacera la herida abierta en el corazón de la familia y amigos de Álvaro Gómez. Hoy, a pocos días de cumplirse 25 años de este asesinato, los miembros del antiguo secretariado de las extintas FARC-EP reconocemos ante la familia de Gómez Hurtado, el país y el mundo que somos responsables de este hecho”, confesaron.

Al final del comunicado, el ahora partido político reconoce que fue un error haber asesinado “a un político de la talla de Álvaro Gómez Hurtado. Hemos leído sus biografías y hoy sabemos que su contribución a la paz del país habría sido fundamental. Pero la guerra nubla la mirada de futuro y sólo permite ver la realidad en blanco y negro y dividirla en amigos y enemigos”.