Los aviones son nidos de gérmenes, pero no peores que la oficina o la casa

Un estudio analizó más de 200 muestras de aire y material en las superficies como los cinturones de seguridad o las bandejas de los asientos, tomadas en diez vuelos transcontinentales. El resultado echa por tierra algunos mitos

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Se cree que viajar en avión expone a las personas a un alto riesgo de contagio, pero no es así.
Se cree que viajar en avión expone a las personas a un alto riesgo de contagio, pero no es así.

Los aviones tienen una mala reputación como incubadoras de toda clase de enfermedades. Sin embargo, un estudio demostró que, si bien como cualquier lugar cerrado dejan a las personas en la obligada compañía de los gérmenes de los demás, no son más peligrosos que los hogares o las oficinas.

El trabajo del Instituto de Tecnología de Georgia y la Universidad de Emory estudió el microbioma (el conjunto de bacterias ambientales) de los aviones y halló que no es demasiado diferente de los microbiomas de las casa y los lugares de trabajo. "Los pasajeros de la aeronavegación no deberían sentir miedo por las historias sensacionalistas sobre los gérmenes en los aviones", dijo en un artículo para la publicación de Georgia Tech Vicki Stover Hertzberg, coautora de la investigación y profesora de la Escuela de Enfermería de Emory.

El estudio analizó 229 muestras del aire y las superficies, como la bandeja de los asientos.
El estudio analizó 229 muestras del aire y las superficies, como la bandeja de los asientos.

"Deberían reconocer que los microbios están en todas partes y que un avión no es mejor ni peor que un edificio de oficinas, un vagón del subterráneo, una casa o un aula", agregó. "Todos estos ambientes tienen microbiomas que se parecen porque los lugares están ocupados por personas".

Más de 3.000 millones de pasajeros por año viajan por aire. Se conoce, además, el papel de los viajes en la transmisión de pandemias. Y sin embargo, sólo se han documentado dos docenas de casos de contagio en un avión.

La cabina de un avión es una muestra perfecta de ambiente artificial, pues hasta el aire se recicla.
La cabina de un avión es una muestra perfecta de ambiente artificial, pues hasta el aire se recicla.

"Con el objetivo de caracterizar el microbioma de la cabina de un avión, nuestro equipo hizo diez vuelos transcontinentales en los cuales se recogieron 229 muestras del aire y de las superficies que se tocan", explicó el artículo. Las bandejas de los asientos, los cinturones de seguridad y los picaportes de los baños fueron cuidadosamente registrados.

"Aunque las cabinas de los aviones son ejemplos perfectos de un ambiente artificial, tienen rasgos únicos", según el trabajo. "Aire muy seco, frecuente densidad alta de ocupación, exposición a la microbiota de la atmósfera alta, largos periodos en los cuales los ocupantes tienen movilidad limitada", enumeró. La mitad del aire de una cabina se recicla pasándolo por un conjunto de filtros, mientras que la otra mitad se toma del exterior. Y si bien cada aerolínea tiene un protocolo diferente, todas en general desinfectan las superficies que tocan los pasajeros tras el aterrizaje de una aeronave.

Pasar cuatro o cinco horas en un avión no es más riesgoso que pasar 4 o 5 horas en una oficina.
Pasar cuatro o cinco horas en un avión no es más riesgoso que pasar 4 o 5 horas en una oficina.

La mayor parte de las bacterias que encontraron los investigadores provinieron de la piel y la boca de las personas; el resto eran las bacterias ambientales generales. Si bien las del aire eran distintas que las de las superficies, las distintas superficies resultaron contener ser las mismas bacterias.

"A pesar de la singularidad de la cabina de los aviones en tanto ambientes artificiales, nuestros hallazgos son asombrosamente coherentes con otros estudios recientes del microbioma de otros ambientes artificiales", concluyeron los científicos. A pesar del sensacionalismo detrás del negocio de desinfectantes de bolsillo, máscaras quirúrgicas y hasta pastillas anti-resfrío para llevar a un avión, "en cuatro o cinco horas que se pasan en un avión no hay más riesgo que en cuatro cinco horas que se pasan en una oficina", sintetizaron.

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