El alcalde de Río de Janeiro anunció la cesación de pagos en medio del colapso del sistema de salud

La ciudad afronta una severa crisis financiera y se le adeudan más de tres meses de pagos a los trabajadores tercerizados del área sanitaria

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El alcalde Marcelo Crivella, un pastor evangélico cuya reelección para 2020 cuenta con el respaldo del presidente Jair Bolsonaro
El alcalde Marcelo Crivella, un pastor evangélico cuya reelección para 2020 cuenta con el respaldo del presidente Jair Bolsonaro

La Alcaldía de Río de Janeiro, la ciudad más turística de Brasil, anunció este martes la suspensión provisional de “todos los pagos y demás movimientos financieros” hasta nueva orden, debido a la severa crisis económica y fiscal que golpea al municipio gobernado por el intendente Marcelo Crivella, un pastor evangélico cuya reelección para 2020 cuenta con el respaldo del presidente Jair Bolsonaro

La medida fue publicada en el Diario Oficial de la urbe y es de carácter “puntual”, por lo que, según la Alcaldía de la capital fluminense, puede ser revertida “en cualquier momento”.

La Secretaría Municipal de Hacienda suspendió provisionalmente los pagos a ser realizados por el Tesoro Municipal”, señaló el Ayuntamiento carioca en un comunicado.

De acuerdo con la resolución, el objetivo es “ajustar la caja”, en función “de los embargos determinados por la Justicia”, si bien no aclaró si la suspensión de pagos afecta a todos los funcionarios y servicios o solo a sus proveedores.

La semana pasada, un juez de lo laboral determinó el bloqueo de 300 millones de reales (unos 75 millones de dólares) en cuentas de la Alcaldía para pagar las deudas pendientes con los trabajadores tercerizados del área de salud, en huelga por el atraso en el pago de los salarios de octubre, noviembre y la paga extra.

Esto generó caos en los hospitales ubicados en las zonas más pobres de Río y hasta un conflicto de Crivella con la TV Globo -competencia de la Record, del autodenominado obispo Macedo-, ya que impidió entrar a las conferencias de prensa a los periodistas de ese medio. Hay 24 unidades de salud paralizadas y por eso intervino el gobierno federal de Bolsonaro para anticipar recursos del Tesoro Nacional al municipio carioca.

Una vista de Rio de Janeiro, Brasil. Deciembre, 2019. REUTERS/Ricardo Moraes
Una vista de Rio de Janeiro, Brasil. Deciembre, 2019. REUTERS/Ricardo Moraes

Río de Janeiro afronta una severa crisis fiscal, con bajos niveles de recaudación que han obligado a la ciudad a aumentar su deuda para cumplir con sus compromisos financieros.

Según un reciente sondeo elaborado por el Instituto Datafolha, el 72 % de los cariocas considera “mala” o “pésima” la gestión del alcalde de Río, Marcelo Crivella, un antiguo pastor evangélico, mientras que un 20 % la calificó de “regular” y solo un 8 % opinó que es “buena”.

Crivella, que pretende presentarse a la reelección de cara a las elecciones municipales del próximo año en Brasil, aparece en tercer lugar en las encuestas de intención de voto, por detrás del exalcalde Eduardo Paes y del diputado federal Marcelo Freixo, del Partido Socialismo y Libertad (PSOL).

(Con información de EFE y Télam)

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