Acceso a tratamiento, reto clave para controlar VIH en Latinoamérica en 2030

De acuerdo con ONUSIDA, actualmente en el mundo hay 36,7 millones de personas que viven con VIH y, hasta 2016, en América Latina se veían afectadas por el virus 1,8 millones

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En México se estima que 220.000 personas vivían con el virus en 2016 y en 2017 se registraron 12.000 nuevos casos, cifra inferior a los 15.000 nuevos infectados que se registraron en el 2000
En México se estima que 220.000 personas vivían con el virus en 2016 y en 2017 se registraron 12.000 nuevos casos, cifra inferior a los 15.000 nuevos infectados que se registraron en el 2000

En garantizar el acceso al tratamiento es fundamental para que en 2030 el Virus de la Inmunodeficiencia Humana (VIH) deje de ser una amenaza para la salud pública en Latinoamérica y esté bajo control, es un anhelo en el que coinciden  especialistas.

"La meta es ambiciosa pero alcanzable. Es posible sólo si cada persona que lo necesita tiene acceso al tratamiento retroviral", señaló el doctor Pedro Cahn, director científico de fundación Huésped de Argentina, en el Congreso Latina Forum en VIH 2018 que se celebra en Ciudad de México.

El especialista dijo que el trabajo es arduo, pues en la región solo Brasil, Argentina y México son los países que están cerca de alcanzar la meta 90-90-90, la cual se propone que al menos 90% de las personas con VIH conozcan su estado, que el mismo número reciban tratamiento y que tengan supresión viral.

"En México, una de las claves ha sido la cobertura universal para todos los pacientes, medicamentos de calidad, pruebas de monitoreo y seguimiento", aseguró el doctor Luis Soto, jefe del laboratorio de virología molecular del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán (INCMNSZ).

De acuerdo con Cahn, en Latinoamérica no todos los países garantizan a los enfermos acceso al tratamiento, debido en gran parte a que "esta epidemia golpea más a los países más pobres y a los sectores más vulnerables de la sociedad".

Los especialistas coinciden en que los avances en cuanto a los tratamientos han sido una herramienta importante para controlar la enfermedad
Los especialistas coinciden en que los avances en cuanto a los tratamientos han sido una herramienta importante para controlar la enfermedad

Haití ha hecho un gran esfuerzo para controlar el virus pese a sus condiciones políticas y económicas: "pese a ello han logrado reducir la tasa de infección del 8% al 4%", señaló el especialista.

El doctor Carlos Leonardo Magis Rodríguez, director de atención integral de Censida, señaló que el reto es fomentar el diagnóstico oportuno, sin embargo, el estigma y el miedo evitan que las personas se realicen la prueba.

“Hace falta un esfuerzo en la detección. En México, aunque el 94% de los diagnosticados se encuentran en tratamiento, solo un 70% de las personas que tienen VIH lo saben”, aseguró.

En ese sentido, Soto indicó que hay que concienciar a la población que esta enfermedad pasó de ser un padecimiento mortal a una enfermedad crónica manejable. "Se debe saber que una persona con el virus suprimido ya no transmite el VIH", dijo.

"El tratamiento antirretroviral está consolidado como la herramienta que permite a los pacientes tener una calidad de vida similar a la de otra persona sana de la misma edad", dijo Cahn.

El experto señaló que el objetivo ahora es que los tratamientos sean de larga duración, que permitan dosificaciones mensuales y combinaciones más sencillas y seguras.

El doctor Soto dijo que otro de los retos es la prevención de la enfermedad, sobre todo, en aquellos grupos considerados de riesgo, es decir, que tienen prácticas que pueden exponerlos a la transmisión del virus.

Actualmente, uno de los tratamientos más innovadores en este sentido es la profilaxis pre-exposición (PrEP), que es un medicamento antrirretroviral que ayuda a reducir las posibilidades de adquirir el virus, aunque su alcance y cobertura en América Latina aún son limitados.

"El PrEP no es algo que pueda aplicarse a todas las personas, sino a los principales grupos de riesgo. Del mismo modo hay que señalar que este tratamiento no reemplaza al condón, pues no protege de otras infecciones de transmisión sexual ni previene embarazos", argumentó.

Con información de EFE

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