Michel Temer buscará el respaldo del Congreso para salvar su presidencia

Después de que se divulgara la grabación en la que avala el pago de un soborno, el presidente brasileño enfrenta ocho solicitudes de impeachment y pedidos de renuncia. Por eso, necesita mantener el apoyo de los aliados, en una asamblea plagada de legisladores involucrados en escándalos de corrupción

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El presidente de Brasil Michel Temer en el primer discurso tras el escándalo: “No renunciaré”, dijo (Reuters)
El presidente de Brasil Michel Temer en el primer discurso tras el escándalo: “No renunciaré”, dijo (Reuters)

Michel Temer espera salvar este viernes su presidencia persuadiendo a un Congreso plagado de corrupción de que lo respalde a pesar de las crecientes demandas para que ruede su cabeza, en el marco de un nuevo y explosivo escándalo en el país.

Su oficina informó que Temer comenzará esta jornada en una reunión con su ministro de Defensa, Raul Jungmann, y con los comandantes militares en el complejo presidencial.

Esa agenda parece haber sido diseñada como para destacar que el presidente de centro-derecha mantiene su autoridad.

Temer rechazó enfáticamente el jueves la posibilidad de renunciar después de que el Supremo Tribunal Federal (STF) autorizara una investigación judicial en su contra.

El mandatario está acusado de haber dado luz verde al pago de un soborno para comprar el silencio del ex presidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Cunha, quien está en prisión acusado de haber aceptado millones de dólares en coimas.

Las denuncias del pago de dinero a cambio del silencio dejó a Temer en la cuerda floja menos de un año después de haber asumido el cargo en controvertidas circunstancias en reemplazo de su predecesora, Dilma Rousseff, destituida por el Congreso tras un juicio político (impeachment).

Temer enfrenta ahora ocho solicitudes de impeachment presentadas en el Congreso y una dura batalla para mantener unida a su coalición de gobierno.

Hubo protestas de miles de personas en Rio de Janeiro y en la capital, Brasilia, en demanda de la renuncia del mandatario, que terminaron en choques con la policía.

Más manifestaciones están previstas para esta semana.

Depender de un Congreso corrupto

El desafío de Temer de permanecer en la presidencia dejó el balón en el campo del Congreso.

El STF, que tiene a su cargo las causas contra políticos en funciones, raramente toma decisiones rápidas acerca de investigaciones y se sospecha que a menudo alarga el tratamiento de los casos que tiene entre manos.

Esto deja el procedimiento del juicio político como la vía más probable para desplazar a Temer del poder, como hace poco menos de un año cuando Rousseff fue separada del cargo por manipulación de las cuentas públicas y Temer, su vicepresidente, la reemplazó automáticamente.

Eduardo Cunha detenido (AFP)
Eduardo Cunha detenido (AFP)

Pero para que esto ocurra, la poderosa coalición que apoya a Temer en el Congreso, o al menos una parte de ella, debería darle la espalda, así como los integrantes de su gobierno.

El ministro de Cultura, Roberto Freire, renunció el jueves a su cargo y los medios brasileños abundaban en informes sobre amenazas de otros ministros de retirarse del gobierno.

Temer tratará de detener esa sangría, especialmente con los principales aliados de su conservador Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), los integrantes del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB).

El Parlamento, en cuyos manos está el destino de Temer, está plagado de legisladores involucrados en escándalos de corrupción. Unos dos tercios de sus miembros ha tenido problemas de diverso grado con la ley. Y un tercio de los senadores está siendo investigado por su participación en la operación 'Lava Jato'.

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(Por Eugenia LOGIURATTO / Damian WROCLAVSKY, AFP)