Las autoridades de Rusia han anunciado este jueves el la destrucción de más de 90 drones lanzados por el Ejército de Ucrania contra varias regiones rusas y la península de Crimea, anexionada en 2014, sin pronunciarse sobre posibles víctimas o daños, en el marco de la guerra desencadenada en febrero de 2022 por el inicio de la invasión de territorio ucraniano. "Durante un intento del régimen de Kiev de llevar a cabo un ataque terrorista usando aparatos aéreos no tripulados contra objetivos en territorio de la Federación Rusa, los sistemas de defensa aérea destruyeron e interceptaron 92 drones ucranianos", ha manifestado el Ministerio de Defensa ruso. Así, ha especificado en un comunicado publicado a través de su cuenta en Telegram que 47 aparatos han sido derribados en Krasnodar, mientras que doce han sido destruidos en Kursk y nueve lo han sido en Rostov. A ellos se suman cuatro en Briansk, dos en Bélgorod y uno en Voronezh. El ministerio ha subrayado además que dos aparatos han sido interceptados sobre la península de Crimea --cuya anexión por parte de Moscú no ha sido reconocida por la comunidad internacional--, mientras que otros 15 han sido destruidos sobre las aguas del mar de Azov. A primera hora del día, las autoridades rusas han anunciado la evacuación de la localidad de Ródnikov, ubicada en la periferia de Maikop, capital de la república de Adigueya (suroeste) después de un ataque ucraniano con drones, sin que Moscú se haya pronunciado oficialmente al respecto.