Quito, 10 sep (EFE).- La selección de Perú se marchó de Quito con "desazón" tras haber caído por 1-0 en la octava fecha de las eliminatorias sudamericanas para el Mundial de 2026, lo que deja a la Blanquirroja descolgada en la última posición con 3 puntos.
"Nos vamos con esa desazón de no haber podido sacar nada de Quito, pero aún falta. Esto es partido a partido. Hay que luchar cada pelota como si fuese la última, como hemos hecho en estos dos partidos", señaló tras el partido el centrocampista Jean Archimbaud, que ingresó a la cancha para jugar el segundo tiempo.
"Hay que confiar, aún falta mucho. Esto es largo y es punto a punto. Hay suficientes cupos para poder ilusionarse", reiteró.
Por su parte, el también centrocampista Wilder Cartagena comentó que la Bicolor acabó el encuentro en el estadio Rodrigo Paz Delgado con mal sabor de boca porque "no se dieron las cosas".
"En el primer tiempo creo que tuvimos un buen trabajo táctico, aunque no tuvimos llegadas. En el segundo se mantuvo esa idea pero no fuimos suficientemente punzantes y parecía que ellos en cualquier momento nos podían anotar otro gol", destacó Cartagena.
El futbolista del Orlando City consideró este encuentro "para hacer un partido inteligente", enfocado en dosificar fuerzas por la altitud de la capital ecuatoriana, sobre los 2.800 metros sobre el nivel del mar.
"Creo que nos faltaron cosas por hacer. Ese gol que nos hicieron lo pudimos evitar", dijo Cartagena en referencia al tanto anotado por el delantero ecuatoriano Enner Valencia en el minuto 54.
Mientras, el defensa Alexander Callens coincidió en que "jugar en Quito es muy difícil y Ecuador tiene muy buenos jugadores y viene de una racha muy buena".
"Creo que para poder ganar tenemos que hacer goles. Hay una deuda de todos. Para hacer un gol, necesitamos a los once. Defensivamente hicimos un buen partido. Los aficionados de Ecuador pitaban a sus jugadores porque no veían la forma de entrar", recordó.
No obstante, Callens apuntó que "que esto todavía no acaba" y mencionó que aún hay 30 puntos en juego, con los que Perú puede revertir su actual situación.