El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, ha destacado este jueves la importancia de evitar "malentendidos" con China durante su viaje al gigante asiático y ha subrayado que ambos países "tienen una obligación con la gente, e incluso con el mundo, a la hora de gestionar sus relaciones bilaterales". Así se ha pronunciado tras su llegada a la ciudad de Shanghái, donde se ha reunido con el secretario general del Partido Comunista chino en la ciudad, Chen Jining, al que ha trasladado que el objetivo de la Administración del presidente estadounidense, Joe Biden, es "seguir construyendo una relación diplomática en base a la comunicación" para "lidiar directamente con las diferencias que puedan surgir entre las partes". "Me he reunido el secretario del partido de Shanghái, Chen Jining, para discutir la importancia de una competencia económica sana y la igualdad de condiciones para los trabajadores y empresas estadounidenses que operan en China", ha indicado Blinken en un mensaje difundido a través de su cuenta en la red social X. En este sentido, ha reivindicado la cooperación y ha agradecido la bienvenida recibida, si bien su llegada se produce poco después de que Biden firmara una ley que facilita la entrega de un multimillonario paquete de ayuda que incluye asistencia para Ucrania y Taiwán y para "contrarrestar las acciones agresivas" de Pekín en el mar de China Meridional, según ha indicado el Departamento de Estado en un comunicado. Se trata de la primera visita de un secretario de Estado del país norteamericano a Shanghái en 14 años. No obstante, las autoridades chinas no han confirmado un posible encuentro con el presidente chino, Xi Jinping, a pesar de que ambos se reunieron el pasado mes de junio durante una visita de Blinken a China. Blinken trata de convencer a las autoridades chinas para que restrinjan su relación comercial con Rusia, que permite a Moscú mantener en gran medida su industria militar en plena invasión de Ucrania a pesar de las sanciones impuestas por la comunidad internacional. También está previsto que aborde la postura de China sobre Taiwán, a la que considera parte de su territorio.