Una influyente obra de la primera etapa de Fra Angelico será subastada en Londres en julio

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Londres, 1 jun. El grabado del pintor italiano Guido di Pietro, más conocido como Fra Angelico o Fray Angélico, "Crucifixión. La Virgen, San Juan Bautista y la Magdalena al pie de la Cruz", uno de sus trabajos más influyentes, será el plato fuerte de una subasta que se celebrará el 6 de julio en Christie's en Londres.

En un comunicado difundido hoy por la casa de pujas, se indica que la obra, un trabajo temprano y pionero de Fra Angelico, formará parte de la venta dedicada a los Antiguos Maestros y se estima que su precio oscilará entre los 4 y los 6 millones de libras (4,6 y 6,9 millones de euros).

Christie's señala que el grabado fue descubierto y publicado por Francis Russell, vicepresidente de la casa en el Reino Unido, en la revista Burlington en mayo de 1996 y despertó un gran interés entre los académicos.

Fra Angelico fue uno de los primeros pintores que aprendió las lecciones de escultura contemporánea y la obra en sí, según el comunicado, "aúna la expresión emocional y la mordacidad amplificada por la condición original de las figuras que, al no haber sido limpiadas recientemente, proporcionan al espectador del siglo XXI una notable ocasión de experimentar el maravilloso sentido del color del artista".

Al parecer, fue adquirida por el segundo Lord Ashburton, que falleció en 1864, con lo cual el grabado pasó a uno de sus descendientes.

La obra podrá contemplarse en Nueva York desde el 10 al 14 de junio, antes de regresar a Londres, donde se exhibirá desde el 1 al 6 de julio.

"Fue un momento emocionante cuando me di cuenta de que me encontraba en presencia de una obra maestra temprana de Fray Angélico", afirma en la nota Francis Russell, vicepresidente de Christie's en el Reino Unido.

Según observa, el grabado "ejemplifica su profunda convicción religiosa" y es una obra "intensamente personal, que también expresa su comprensión del logro revolucionario de los grandes escultores florentinos de la época".

"La ternura con la que se representa Cristo se iguala con la emoción cruda de la Virgen y el patetismo del arrodillamiento de la Magdalena aferrándose a la Cruz, la densidad del cual se revela por la posición de sus brazos", apunta.

El experto agrega que "cada gesto está perfectamente medido" y afirma que "la sensibilidad del uso del pintor del color es evidente en cómo tanto la sangre de Cristo y el pelícano que está encima se igualan en la túnica de la Magdalena. Con Fray Angélico nada era accidental". EFE

prc/er/ad