Cuando Cuba pedía ayuda militar contra EEUU y la URSS quería evitar una "gran guerra"

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En julio de 1960, el entonces ministro de Defensa cubano, Raúl Castro, quiso detalles de cómo la Unión Soviética protegería a la isla frente a un ataque de Estados Unidos, pero la URSS pidió contención porque no quería una "gran guerra", según documentos revelados este viernes.

Fue dos años antes de que la crisis de los misiles de octubre de 1962 pusiera al mundo en vilo, después de que Estados Unidos se enterara de la presencia de bases de misiles nucleares del ejército soviético en Cuba.

En 1960 el régimen soviético se preguntaba por el futuro de la revolución cubana y envió al vice primer ministro Anastas Mikoyan a la isla.

Este último regresó a Moscú "encantado con la energía juvenil" de los 'barbudos', que "encabezaban un auténtico movimiento antiimperialista", se lee en la página web del Archivo de Seguridad Nacional, una oenegé vinculada a la universidad George Washington.

El viaje propició visitas de delegaciones cubanas a la Unión Soviética, a la que se había acercado más desde que Estados Unidos decidiera imponer un bloqueo económico al país.

Fidel Castro no era marxista pero le preocupaba la posibilidad de una invasión por parte de Estados Unidos.

De pronto Nikita Jrushchov, primer secretario del comité central del Partido Comunista de la Unión Soviética, hizo una declaración que parecía sugerir que, en caso de una intervención estadounidense, su país defendería la revolución cubana con todos los medios militares a su alcance.

"Hablando en sentido figurado, en caso de necesidad, los artilleros soviéticos pueden ayudar al pueblo cubano con sus disparos de cohetes si las fuerzas agresivas del Pentágono se atreven a lanzar una intervención contra Cuba", dijo.

Y recordaba al Pentágono que sus cohetes podían impactar a 13.000 km de distancia.

Pero en su primer cara a cara con Raúl Castro fue más moderado.

"Trataremos de hacer todo lo posible para no permitir una intervención contra Cuba. Pero no queremos una guerra" y "hay que tener en cuenta que se podría desatar una gran guerra defendiendo a Cuba", afirmó.

Raúl le dice que Fidel Castro quiere saber "hasta qué punto las acciones de la Unión Soviética podrían ser decisivas", se lee en el documento del Archivo Estatal de la Federación Rusa, subido a la página web del Archivo de Seguridad Nacional.

Jruschov reacciona con cautela. Habla de la voluntad soviética de apoyar económicamente a Cuba, incluso "de responsabilizarse por el suministro de petróleo y otros bienes" y de adquirir las 700.000 toneladas de azúcar que Estados Unidos se negó a comprar. Está convencido de que el bloqueo de Estados Unidos "está condenado al fracaso".

Pero "ustedes, los líderes de la república cubana, deben contenerse para no dejarse provocar", añade. "Si tuviera fronteras comunes con la URSS, los hechos habrían tomado un curso diferente, pero como sabemos, limita con Estados Unidos".

erl/dga